Sídney - La policía australiana señaló ayer que “no hay evidencia” de que el atropello de casi dos decenas de personas en una de las calles de Melbourne se trate de un acto terrorista. Instantes después de que un todoterreno arrollara a los transeúntes, los oficiales apresaron a dos sospechosos. El conductor, un varón australiano de 32 años con ascendencia afgana, posee un historial de enfermedades mentales y problemas con las drogas, señaló la policía. Además fue detenido en 2010 por asaltos menores. Un segundo varón, de 24 años, fue arrestado mientras grababa el suceso y en su mochila portaba cuchillos, aunque las autoridades “ahora creen que no tiene conexión con el incidente”. “En este momento no tenemos evidencias o información de inteligencia que indique que existe una conexión con el terrorismo”, declaró un portavoz policial. - Efe