Erbil - Las milicias chiíes Multitud Popular y las fuerzas kurdas peshmergas se enfrentaron en las últimas horas al sur de la disputada ciudad de Kirkuk (norte) en plena escalada de tensión, informaron ayer responsables de ambas partes y testigos. El secretario general de las fuerzas de seguridad kurdas, Yabar Yaur, aseguró que “hombres armados desconocidos abrieron fuego contra las sedes del Partido Democrático del Kurdistán (PDK) y la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK)” en Tuz Jormato, 70 kilómetros al sur de Kirkuk y que acoge a una población de árabes, turcomanos y kurdos. Yaur no responsabilizó a nadie de la autoría de los disparos, que no causaron víctimas, pero sí daños materiales en las sedes de los dos principales partidos kurdos. El responsable militar explicó que se están llevando a cabo reuniones para esclarecer las circunstancias del incidente y que están a la espera de los resultados.

Por su parte, Sayed Ali al Huseini, portavoz de las milicias Multitud Popular -apoyadas por Irán- en las zonas del sur de Kirkuk y el norte de la provincia de Saladino dijo que el ataque empezó cuando hombres “armados de los partidos del Gobierno kurdo abrieron fuego contra la zona de Al Huseiniya”, situada cerca del cementerio de Tuz Jormato y frente a un barrio kurdo.

Según el responsable, “abrieron fuego y luego lanzaron misiles RBG-7, y a partir de ahí, empezaron las disputas”. Añadió que en esos enfrentamientos murió un niño de 7 años, mientras que hubo heridos, sin especificar la cifra, por “el bombardeo indiscriminado” por parte de los kurdos. Sin embargo, Ahmed Ibrahim, uno de los habitantes de Tuz Jormato, aseguró que el incidente tuvo su origen cuando “dos personas turcomanas (una minoría que Turquía considera como hermana) de la Multitud Popular, que montaban en moto, lanzaron una granada contra una de las sedes de la UPK y la guardia respondió”.

Este suceso ocurre en un momento de gran tensión entre ambas partes, pues el primer ministro iraquí, Haidar al Abadi, dio un ultimátum de 48 horas -que los kurdos han rechazado- para entregar la disputada provincia de Kirkuk a las autoridades iraquíes. Kirkuk, ciudad rica en petróleo, se ha convertido en el principal centro de las tensiones entre ambos Gobiernos, y por el momento, Bagdad ha anunciado su intención de administrar la extracción de crudo de los pozos de Kirkuk. De hecho, se encuentra entre los territorios disputados entre Erbil -capital del Kurdistán-y Bagdad, ya que parte de la provincia está ocupada por las tropas kurdas desde que expulsaron al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en 2014, aunque administrativamente pertenece a Bagdad.- Efe