Estambul- Las autoridades de la provincia de Ankara anunciaron ayer que queda prohibida toda protesta, huelga, reunión o conmemoración durante el mes de agosto, argumentando que estas concentraciones aumentan el peligro de atentados terroristas.

En un comunicado emitido ayer, la oficina del gobernador alude a la detención de Nuriye Gülmen y Semih Özakça, dos profesores turcos en huelga de hambre desde hace más de 140 días en protesta contra un decreto que provocó su despido.

La gobernación los relaciona con el grupo ultraizquierdista Partido-Frente Revolucionario de Liberación Popular (DHKP-C) y argumenta que la prohibición de protestas en el espacio público evita muestras de apoyo a este grupo.

Por otro lado, la gobernación indica que las manifestaciones “perturban a los ciudadanos y el orden público” y facilitan la actuación de grupos terroristas como el Estado Islámico (EI). - Efe