El Cairo - Los combates se reavivaron ayer en varios lugares del norte de Siria y prosiguieron, con menor intensidad, en el extrarradio de Damasco, mientras se vive una calma relativa en las zonas en tregua del sur del país. La provincia de Alepo, en el extremo norte del país, fue escenario de combates entre las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, y los rebeldes y facciones islámicas, por un lado; y entre fuerzas turcas y kurdosirias, por otro.

Turquía disparó proyectiles contra la localidad de Afrín, de mayoría kurda, y otros pueblos de la zona, cercana a la frontera turca, según activistas y fuentes kurdas.

Esa región está bajo el control de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo), una milicia considerada terrorista por Ankara por su vinculación con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) y que forma parte de la alianza armada que combate al grupo yihadista Estado Islámico (EI) en Al Raqa. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, la artillería turca causó varios heridos. - Efe