Londres - El ministro británico para el Brexit, David Davis, declaró ayer que está “bastante seguro” pero que no tiene “la certeza” de poder llegar a un acuerdo comercial con la Unión Europea (UE) para cuando el Reino Unido deje el bloque. En una entrevista con El Programa de Andrew Marr de la BBC, el presentador le preguntó si estaba seguro de que se firmaría un acuerdo. “Estoy bastante seguro, aunque no estoy seguro al 100 %; uno nunca puede estarlo, esto es una negociación”, respondió el ministro.

Cuando Marr le recordó que anteriormente había “garantizado” que se llegaría a un pacto, Davis incidió en que la situación es imprevisible. “Podemos estar seguros de que habrá un acuerdo, pero sobre si será el acuerdo que quiero, que es el de libre comercio, el acuerdo aduanero y todo lo demás... estoy bastante seguro, pero no tengo la certeza”, manifestó.

Ante la posibilidad de que no se llegue a ningún acuerdo, el ministro conservador dijo, en línea con la primera ministra, Theresa May, que eso “sería mejor que un acuerdo de castigo” impuesto por la UE. “No podemos vernos en una circunstancia en la que la otra parte dice que te va a castigar. Si eso ocurre, entonces hay que retirarse, y hay que hacer planes para ese caso”, afirmó.

Davis, que describió al negociador de la UE, Michael Barnier, como “muy francés, muy elegante”, aseguró que quiere conseguir un resultado “que beneficie a ambas partes”, y anticipó que seguramente habrá un periodo transitorio de “uno o dos años” antes de que se aplique el nuevo marco regulatorio post Brexit. El responsable británico insistió en que la prioridad es acordar la situación de los expatriados británicos y comunitarios así como las condiciones de la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte.

A preguntas de Marr, Davis reconoció que sería “catastrófico” para la recién comenzada negociación con Bruselas que el gobernante Partido Conservador iniciara un proceso de elecciones internas para reemplazar a May, bajo presión tras perder la mayoría absoluta en las elecciones generales del 8 de junio. Davis pidió a sus colegas tories no ser “autocomplacientes” y apoyar a la primera ministra. Primero, dijo, porque “es muy buena” en su trabajo y, segundo, porque él quiere “un trasfondo estable para las negociaciones del Brexit”.

Desde Escocia Paralelamente, la líder del SNP y ministra principal escocesa, Nicola Sturgeon, pidió en un artículo publicado ayer en el rotativo Sunday Herald que Theresa May incluya a los gobiernos autonómicos al planificar su estrategia negociadora. En esta petición le acompañó el líder de la oposición laborista, Jeremy Corbyn, que escribió en el mismo rotativo que “está claro que la voz del pueblo escocés debe ser oída, y lo mismo para las demás administraciones autonómicas”.

Sturgeon sugiere que “como primer paso, debería haber una reunión del Gobierno del Reino Unido y los gobiernos autonómicos para decidir los objetivos antes del próximo ciclo de negociaciones con la UE en julio”. “Y debe haber un compromiso de considerar seriamente y responder a los intereses de las empresas escocesas, las universidades y otros grupos, que están cada vez más alarmados de cómo se está gestionando el Brexit”, añade la líder independentista.

En otra noticia sobre el Brexit, el ministro británico de Comercio Internacional, Liam Fox, ha anunciado que el Reino Unido mantendrá y mejorará los acuerdos comerciales existentes al amparo de la UE con países en vías de desarrollo tras la salida británica del bloque. Este compromiso afecta a unos 48 países que actualmente pueden exportar a la UE sin aranceles (excepto armas y munición), entre ellos Bangladesh, Sierra Leona, Haití o Etiopía, explicó.

El Gobierno de Londres también explorará “expandir las relaciones” con países en desarrollo como Jamaica, Pakistán y Gana. “Nuestra marcha de la UE ofrece la oportunidad de mejorar nuestros compromisos con el resto del mundo, no de eludirlos”, declaró Fox. “El comercio libre y justo ha sido el mayor liberador de los pobres del mundo, y el anuncio de hoy demuestra nuestro compromiso por ayudar a los países en desarrollo a hacer crecer sus economías y reducir la pobreza a través del comercio”, afirmó. - Efe