Tokio - La Guardia Costera japonesa informó ayer de que siete miembros de la tripulación del destructor estadounidense USS Fitzgerald están desaparecidos y uno ha resultado herido después de chocar con un carguero filipino en aguas cercanas a Japón. La colisión ocurrió antes de las 02.30 hora local (17.30 GMT) a 104 kilómetros al suroeste de la ciudad japonesa de Yokosuka y a unos 20 kilómetros de las costas de la provincia de Shizuoka.

La Armada estadounidense y la Guardia Costera nipona confirmaron que el carguero involucrado en el choque es el filipino ACX Crystal, de 222,6 metros de largo y 29.060 toneladas, según informaciones recogidas por la cadena pública japonesa NHK.

Varias personas resultaron heridas, informó Estados Unidos en un breve comunicado, entre ellas un tripulante del destructor. Los guardacostas desplegaron cinco embarcaciones y dos aviones en el lugar para las labores de rescate y búsqueda de desaparecidos. Las Fuerzas de Autodefensa del país asiático enviaron, por su parte, un helicóptero para trasladar al marino herido.

Imágenes transmitidas por la NHK muestran daños considerables en el lado derecho del destructor, de 154 metros de largo y 8.315 toneladas de peso, tras la colisión, que según la Marina de EEUU ha abierto una vía de agua en el navío bajo la línea de flotación.

A las 09.00 hora local (00.00 GMT) el USS Fitzgerald navegaba hacia la base de Yokosuka, al sudoeste de Tokio, la principal base naval de Estados Unidos en Japón y donde se encuentra destinado como apoyo en misiones de paz y seguridad en la región de Asia-Pacífico, informaron los guardacostas japoneses. El buque, con una tripulación de unos 330 marinos, pertenece a la clase Arleigh Burke de destructores lanzamisiles, que se encuentran entre los de mayor tamaño y potencia de fuego construidos en EEUU.

El carguero filipino, que resultó dañado en el lado izquierdo de la sección de proa, también emprendió la marcha, en su caso hacia Tokio, detalló NHK.

Los guardacostas nipones desplegaron cinco embarcaciones y dos aviones en el lugar para las labores de rescate y búsqueda de desaparecidos, mientras que Estados Unidos envió un navío especializado en asistencia médica.

El comandante de la flota estadounidense del Pacífico, el almirante Adam Swift, aseguró que por el momento la prioridad es “la seguridad de la nave y de nuestro marineros”. - Efe