Ginebra - El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad al Hussein, dijo ayer que el grupo terrorista Estado Islámico asesinó a no menos de 163 personas para impedirles huir de Mosul (norte de Irak), en cuyas calles yacían abandonados los restos de decenas de víctimas.

El personal de la Oficina de Derechos Humanos de Naciones Unidas también reportó a Zeid que hay gente desaparecida tras el ataque de los yihadistas, ocurrido el pasado día 1.

“El terrorismo debe ser erradicado, pero de manera inteligente, mientras se preservan los derechos humanos de todos. Recuerden que por cada ciudadano humillado, maltratado o torturado, no solo es una persona la que se siente agraviada por las autoridades, sino toda su familia”, reflexionó al inaugurar la 35 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.

Las tropas iraquíes intentan asfixiar al grupo terrorista Estado Islámico (EI) en el casco antiguo de la ciudad de Mosul (norte) y se preparan para lanzar lo antes posible el último asalto contra los yihadistas desde el flanco sur de la ciudad vieja ubicada en el oeste de la urbe. Un comandante de las Fuerzas Antiterroristas iraquíes, el general Abdelgani al Asadi, dijo a Efe que el EI sólo tiene dos opciones: “Entregarse o morir”, porque se encuentra rodeado por todos los lados.

Asimismo, aseguró que en el casco antiguo de Mosul solo quedan unos “cientos” de combatientes radicales del EI. No obstante, el asalto sobre el casco antiguo se prevé muy largo y sangriento. - Efe