Londres - El Gobierno británico ha aceptado la petición del Partido Laborista de hacer público su plan sobre el Brexit antes de comenzar las negociaciones con Bruselas, si bien con algunas condiciones, confirmó un portavoz de Downing Street. Los laboristas presentaron una moción en el Parlamento con la que pretenden forzar a la primera ministra, Theresa May, a revelar sus planes para la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE) antes de activar el Artículo 50 del tratado de Lisboa.
El Ejecutivo añadió ayer una enmienda a esa moción, que indica que los Comunes “deberían aceptar el resultado del referendo” del 23 de junio; que el Gobierno debería invocar el Artículo 50 del Tratado de Lisboa “antes de finales del próximo marzo” y que la publicación de su plan “no debería socavar” la posición negociadora británica. Está previsto que la moción, titulada El plan del Gobierno sobre el Brexit, se debata hoy.
Un portavoz de Downing Street señaló que la enmienda va al margen y es “un asunto separado” de la batalla legal que actualmente libra el Gobierno en el Tribunal Supremo, en un intento de revocar un dictamen anterior que determina que May precisa de la aprobación parlamentaria para iniciar el Brexit. “La primera ministra ha sido clara al indicar que detallaremos nuestros planes a su debido tiempo. Ésa continúa siendo la posición (oficial)”, apuntó esa fuente oficial. El mismo portavoz agregó que si bien el Gobierno no mostrará sus “bazas negociadoras hasta que tenga que hacerlo”, nunca ha sugerido que no vayan a aclarar cuál es su posición. Se espera que los laboristas acepten las tres condiciones planteadas por el Ejecutivo al tiempo que algunos diputados conservadores ya han indicado que respaldarán la moción en la votación de hoy.
La jefa del Ejecutivo británico se ha negado hasta la fecha a dar detalles sobre la negociación para la salida del Reino Unido de la UE. La propuesta laborista reconoce que algunos puntos de la posición negociadora deben permanecer en secreto, pero pide a May que “se comprometa a publicar el plan del Gobierno para abandonar la UE” antes de invocar el artículo 50. El jefe negociador de la Comisión Europea para el Brexit, el excomisario francés Michel Barnier, avisó ayer de que apenas habrá 18 meses para negociar la salida de Reino Unido una vez que Londres active el proceso formal de divorcio, por lo que espera un acuerdo en octubre de 2018.
La presentación de esta iniciativa coincide con el recurso del Gobierno que atiende esta semana el Tribunal Supremo, contra un dictamen judicial que pide que sea el Parlamento el que vote si se activa el proceso.El Tribunal Superior falló en noviembre en favor de la empresaria Gina Miller, quien, en representación de un grupo de ciudadanos, acudió ante la Justicia para defender que May no puede invocar el artículo sin una votación previa de los diputados. - Efe