Ginebra - Los niños de la ciudad y alrededores de Mosul que han huido tras dos años bajo el yugo del Estado Islámico (EI) están traumatizados por toda la violencia a la que han sido expuestos, y sufren graves heridas físicas y mentales, según denunció hoy Unicef. En teleconferencia desde Ammán, el director regional de Unicef, Gert Cappelaere, relató su reciente visita a Irak el pasado fin de semana, donde pudo hablar con niños y sus madres que han huido de Mosul y alrededores, y están refugiados en el campamento de Dibaga, en la provincia de Nínive.
“Los niños han estado expuestos a niveles extremos de violencia, la que han sufrido ellos, pero también de la que han sido testigos, eso es extremadamente traumático”, dijo Cappelaere. “Muchos, además, han sido sometidos a formas extremas de explotación”, indicó, sin dar más detalles al respecto.
El experto recordó que más de la mitad de la población de Mosul son niños y que lo mismo pasa en los campos de desplazados internos del país. “Sé de niños de menos de 4 años que tuvieron que caminar durante 15 horas en su huida, la mayoría están exhaustos y totalmente atemorizados”. “Les tomará años recuperarse y volver a recobrar la sensación de seguridad”, sentenció Cappelaere.
El experto explicó que las agencias humanitarias y los actores presentes sobre el terreno han comenzado a realizar dos tareas de emergencia: establecer controles médicos de los niños y vacunarlos inmediatamente contra las enfermedades más peligrosas, dado que la mayoría no han sido inmunizados en los últimos dos años.
Precisamente, Tarik Jasarevic, portavoz de la Organización Mundial de la Salud (OMS), explicó que la entidad ha distribuido 54 clínicas móviles en la región de Mosul para poder tratar e inmunizar a los desplazados conforme vayan llegando. “Tememos que puedan surgir enfermedades transmisibles o dolencias relacionadas con las malas condiciones higiénicas y la falta de agua potable”, alertó Jasarevic.
Asimismo, el portavoz de la OMS explicó que la entidad ha ofrecido cursos y entrenamiento para funcionarios iraquíes sobre cómo actuar en casos de actos que provocan muchas víctimas y, específicamente, sobre cómo tratar a heridos de un ataque químico.
Jasarevic recordó que el pasado marzo se registró al menos un ataque químico en Irak y, ante la posibilidad de que se produzcan otros, la OMS ha querido entrenar al personal médico y de primeros auxilios de Irak. - Efe