BOGOTÁ. El detonante de la protesta fue el asesinato el pasado 8 de octubre de la joven de 16 años Lucía Pérez, drogada, violada y empalada en la ciudad de Mar de Plata (Argentina), un feminicidio que ha despertado la rabia de toda la sociedad latinoamericana. La manifestación global fue convocada en los últimos días por el colectivo "Ni una menos", que multiplicó su altavoz por medio de las redes sociales.

Con el nombre "Miércoles negro", Buenos Aires fue el epicentro de la movilización y miles de personas vestidas de luto volvieron a reclamar "Ni una menos, vivas nos queremos", un lema con el que pidieron el fin de la violencia machista que se lleva cada año la vida de más de 200 mujeres en Argentina.

Los países vecinos del Cono Sur se sumaron también a la indignación que ha corrido por todas las ciudades y pueblos argentinos.

En Montevideo (Uruguay), cientos de personas marcharon bajo la lluvia por el centro de la ciudad bajo el lema "Movilizadas nos encontramos con rabia, bronca y dolor".

Uruguay lleva registradas a lo largo de este año 21.985 denuncias por violencia de género, según confirmaron a Efe fuentes del Instituto Nacional de Mujeres (Inmujeres).

También en Chile, por la principal avenida de la capital desfilaron decenas de miles de mujeres vestidas de negro reclamando el endurecimiento de las penas contra la violencia de género.

Durante la jornada, la presidenta Michelle Bachelet, el exmandatario Sebastián Piñera, instituciones como Carabineros de Chile y Fiscalía Nacional, habían difundido en redes sociales mensajes de concienciación sobre un problema que en Chile ha costado la vida a 39 mujeres en lo que va de año, según datos no oficiales.

En la ciudad más grande de Suramérica, Sao Paulo (Brasil) un pequeño grupo de mujeres mostraron también su solidaridad con la joven argentina asesinada y contra el machismo latente que aún persiste en las relaciones sociales entre ambos géneros.

De igual forma en ciudadanos anónimos, en algunos casos de luto y con velas, de Asunción (Paraguay), La Paz (Bolivia) y en Lima (Perú), se sumaron a la convocatoria de protesta. Ya en Centroamérica, que cuenta con los ratios más altos por violencia machista del continente (Honduras, El Salvador y Guatemala encabezan la lista de crímenes de género, según el informe anual 2015 de ONU Mujeres para América Latina), las manifestaciones han tenido un propio sentido regional.

Mientras que en la ciudad de Panamá medio centenar de personas denunciaba la puesta en libertad de unos sospechosos de un feminicidio de 2012, en otros lugares como Guatemala o Nicaragua las demandas han sido más globales.

En la capital de Guatemala, por ejemplo, las artistas Sofía Lantan y Mandy Joa realizaron una representación bajo el título "Vivas nos queremos", donde se reclamaba el fin de la violencia con alambres y manchas de pinturas que simulaban sangre.

La muestra denunciaba así los casi 10.000 asesinatos de mujeres en el país desde el año 2000, según datos del Observatorio del Grupo de Mujeres.

Por otro lado, en Managua (Nicaragua), cientos de mujeres salieron a la calle para exigir el respeto a sus derechos y el cese de los feminicidios.

Las activistas portaban pancartas repudiando los asesinatos que, en lo que va de año, han superado la cifra de 42 mujeres.

Ya en Ciudad de México, al grito "Ni una menos", cientos de personas vestidas de negro y con banderas y pancartas moradas, protestaron en el céntrico monumento conocido como Ángel de la Independencia.

Con carteles con frases como "Si tocas a una, respondemos todas" o "Somos el grito de las que ya no tienen voz", los concentrados recordaron el reciente asesinato de la joven argentina.

Además, la protesta tuvo réplicas en otras ciudades del país. En Guadalajara, capital del estado de Jalisco, grupos de estudiantes y ciudadanos mostraron su repulsa ante los crímenes machistas con la triste autoridad que les confiere vivir en la región donde en febrero fue decretada una alerta de violencia contra las mujeres.

Según cifras del Gobierno de Jalisco, en 2015 se registraron 150 feminicidios.

El clamor internacional contra la violencia machista también tuvo eco en Europa donde en ciudades de España y Francia hubo denuncia en las calles contra la violencia machista en esta jornada denominada en toda América como "Miércoles negro".

Según el Observatorio de Igualdad de Género de América Latina y el Caribe de la Comisión Económica de América Latina y el Caribe (Cepal), al menos 1.678 mujeres fueron asesinadas por razones de género en América Latina el pasado 2014.

Veinte países de América Latina y el Caribe cuentan actualmente con leyes de violencia contra las mujeres, aunque solo en ocho se asignan recursos específicos en su presupuesto nacional.

De igual forma, catorce países han tipificado el delito de feminicidio y dos lo han establecido como un homicidio agravado por razones de género en su legislación.