Ankara - El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, aseguró ayer que el ataque que rebeldes sirios y fuerzas turcas han lanzado contra la ciudad septentrional siria de Dabiq, un feudo del grupo yihadista Estado Islámico (EI), liberará la zona para que los refugiados puedan regresar a sus hogares. “Entramos en Yarábulus. Entramos en Al Rai. ¿Hacia donde avanzamos ahora? Hacia Dabiq. Y vamos a declarar como zona segura libre del terrorismo un área de cinco mil kilómetros cuadrados”, afirmó Erdogan durante un discurso en la ciudad de Rize. Yarábulus y Al Rai son dos ciudades del norte de Siria, cerca de la frontera con Turquía, que el grupo rebelde Ejército Libre de Siria ha arrebatado en las últimas semanas a los yihadistas con el apoyo de Turquía. “No tenemos pretensiones sobre el territorio de ningún país, pero hay tres millones de refugiados en el nuestro”, dijo Erdogan. “Preparemos lugares para ellos, dejemos que regresen a su tierra y démosles una vida segura allí”, subrayó.

La agencia de noticias semioficial turca Anadolu se refirió ayer al apoyo que la artillería turca está prestando al ataque a Dabiq, ubicada a unos 50 kilómetros al norte de Alepo.

El diario Hürriyet informaba ayer de que las tropas turcas que participan en esta ofensiva no entrarán en la ciudad pero darán apoyo a los rebeldes sirios en Dabiq y en la cercana Al Bab. Dabiq, conquistada por el EI en agosto de 2014, ha servido de escenario para algunos de sus vídeos e incluso da nombre a su revista mensual en inglés. - Efe