Tras el ataque que se produjo hacia las 19.00 GMT del martes, cuando tres terroristas suicidas se inmolaron en el control de la entrada a la terminal de vuelos internacionales, se había prohibido el aterrizaje y el despegue de cualquier avión.

El primer ministro, Binali Yildirim, que acudió al lugar de los hechos, afirmó que el aeropuerto había vuelto a abrir, tras un cierre de cinco horas.

Según la información del aeropuerto disponible en la web, la inmensa mayoría de los vuelos siguen cancelados o retrasados, si bien algunos pocos ya han aterrizado o se preparan para el despegue, tanto en la terminal internacional como en la de vuelos nacionales.

La cadena NTV confirma que el aeropuerto está abierto al público y se prepara para recuperar la normalidad.

La mayoría de los vuelos que llegaban durante el cierre fueron derivados a la ciudad de Esmirna, situada a unos 300 kilómetros al suroeste de Estambul.

La compañía de bandera turca Turkish Airlines ha anunciado que cambia o cancela de forma gratuita todos los billetes emitidos hasta el 31 de julio.