Trípoli - Los combates se intensificaron ayer en los aledaños de Sirte, ciudad libia hacia la que avanzan las milicias de la alianza formada por el llamado Gobierno de unidad en un intento por cercar y expulsar a los yihadistas que la controlan desde hace un año. Una fuente de la citada fuerza explicó que unidades de combate se incautaron la noche del domingo de 37 kilos de oro, cerca de 3 millones de dólares y un importe indeterminado en otras monedas que los yihadistas abandonaron en la localidad vecina de Abu Najim, reconquistada tras días de duros enfrentamientos.
“Actualmente no queda ninguna huella del EI aquí, los yihadistas han desaparecido completamente de la ciudad y se han replegado 30 kilómetros al oeste de Sirte”, explicó la fuente. Según su relato, el botín estaba oculto en uno de los edificios de la localidad y junto a él los soldados, la mayoría procedentes de la ciudad vecina de Misrata, hallaron gran cantidad de armas y municiones. “Nuestras informaciones de inteligencia militar apuntan a que los yihadistas han comenzado ya a abandonar Sirte y se han instalado en la ciudad costera de Harawa”, situada a unos 70 kilómetros al este, en cuya comisaría se han visto vehículos del EI repletos de presos, agregó la fuente.
En el frente este están apostadas también las fuerzas fieles al gobierno de Tobruk, bajo el mando del general Jalifa Hafter, quien también reunió a su alto mando para atacar, aunque sin coordinación con la alianza. - Mohamad abdel Kader