Caracas - El escenario político de Venezuela se mantiene en tensión después de que el presidente, Nicolás Maduro, anunciara que aprobó un decreto para protegerse de un supuesto golpe de Estado que se fragua desde el exterior, mientras la oposición sigue presionando para que se active el revocatorio en su contra, y ayer miles de personas volvieron a salir a la calle en una nueva manifestación para el referendo para revocar el mandato de Nicolás Maduro. Una marcha que volvió a ser respondida por el chavismo que también salió ayer a la calle en apoyo al Gobierno.

Maduro anunció que firmó un decreto “de estado de excepción y emergencia económica” que le otorgue “el poder suficiente” para hacer frente al supuesto golpe, y aunque no especificó el contenido de la nueva norma, señaló que esta se hace en respuesta a una conspiración desde Washington. Aseguró que ayer se realizó una reunión en Washington a la que habría asistido el expresidente colombiano Álvaro Uribe que, supuestamente, pidió “la intervención de Venezuela por ejércitos extranjeros”.

El gobernante venezolano dijo que sus enemigos, dentro y fuera de Venezuela, están “envalentonados” por el “golpe de Estado” que, dice, le dieron a la presidenta destituida de Brasil, Dilma Rousseff. Indicó que por ello incluyó en este “decreto de estado de excepción y de emergencia económica” las “medidas necesarias para garantizar la soberanía en cualquier escenario” en el que se pretenda “agredir” a su gobierno “sea política, militar, diplomáticamente desde el exterior”.

El anuncio se realiza mientras la oposición venezolana reunida en la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) sigue informando de acciones para que se active el referendo para revocar el mandato de Maduro cuando ya se cumplen once días desde que fueron llevadas 1.8 millones de firmas de quienes quieren revocatorio ante el Poder Electoral. La MUD presentó ayer durante la manifestación “la ruta” con la que pretenden presionar “pacífica” y “democráticamente” al Consejo Nacional Electoral venezolano (CNE) para dé celeridad al procesamiento de los requisitos para activar el referendo revocatorio. - Efe