Londres - El laborismo irlandés contaba con 33 escaños cuando se convocaron nuevas elecciones y gobernaba en coalición, pero ahora tras la cita con las urnas del viernes sólo tienen seis confirmados, lo que podría convertirse en el peor resultado de la historia del partido más antiguo de Irlanda, fundado en Clonmel en 1912.
“Mi papel como líder continúa” dijo la laborista Joan Burton, quien estuvo a punto de perder su escaño por Dublín Oeste por tan solo una diferencia de 500 votos, rechazando así dimitir. “No vamos a tomar ninguna decisión en relación con el futuro de la dirección del partido hasta que sepamos todos el recuento electoral”, puntualizaba la hasta ahora vicepresidenta irlandesa.
La dirigente reconoció que era “un día muy difícil” para su partido y subrayaba la decepción por sus colegas que habían hecho “un gran servicio a nivel local y nacional, pero habían perdido sus puestos”. Sin embargo, el electorado irlandés rechazó así las medidas de austeridad y su apoyo al impuesto del agua, que antes era gratuito en Irlanda.
El hasta ahora diputado en el sur de Cork, el laborista Michael McCarthy subrayaba ayer que su partido debía reagruparse y reorganizarse para trazar una estrategia para su supervivencia.
Para McCarthy en estos momentos, la única opción viable de gobierno sobre la mesa es una coalición entre FG y FF, pero pronostica que “no va a durar más haya del primer presupuesto”, por lo que habría elecciones de nuevo en noviembre. - R. Álvarez Tudela