LONDRES. El Banco Central Europeo pondrá fin este domingo a la línea de asistencia de liquidez de emergencia (ELA, por sus siglas en inglés) a los bancos de Grecia, medida declarada para responder a la fuga de depósitos del país, tras la ruptura de negociaciones entre Atenas y la Unión Europea, según fuentes de la cadena británica BBC.

"Creemos que el Gobierno griego no tendrá más remedio que anunciar día festivo para los bancos mañana lunes mientras introducen controles de capital", que en este caso suponen restricciones sobre la cantidad de efectivo que los griegos podrían retirar de sus bancos, según una fuente que la cadena describe como "bien situada".

Al tiempo que ha aparecido esta información, el primer ministro francés, Manuel Valls, ha expresado sus dudas sobre esta posibilidad. "No creo que el BCE sea capaz de dejar a los griegos sin provisiones", ha declarado en una entrevista concedida esta mañana a la cadena gala Europe 1.

Hay que recordar que la liquidez de emergencia a un Estado miembro no está supeditada a que esté vigente un programa de rescate, sino que depende de la solvencia de sus bancos.

No obstante, un posible impago de Grecia de los 1.500 millones que debe abonar al Fondo Monetario Internacional (FMI) el 30 de junio pondría en cuestión la solvencia del Estado, lo que a su vez repercutiría en la banca, según han explicado las fuentes consultadas.