Bruselas - No hay cifras oficiales pero sí estimaciones que apuntan a 3.000 europeos combatiendo en Siria o Irak, una cifra que podría ser solo la punta del iceberg. Muchos de ellos habrían muerto, otros seguirían allí pero algunos han regresado a Europa entrenados en el uso de armas y explosivos, con la intención de hacer la yihad en el corazón del viejo continente. A países como Francia o Bélgica, los dos Estados miembros con mayor número de combatientes. Según un estudio del ICSR publicado a finales del año pasado, solo a Siria se habrían marchado desde principios de 2011 entre 2.000 y 5.500 combatientes extranjeros, entre 135 y 590 procedentes de Europa y entre 70 y 441 todavía estarían allí. Ese mismo estudio sitúa a Francia a la cabeza de este problema (700 combatientes, por delante de Reino Unido (500), Alemania (400), Bélgica (300), Holanda (150), España (100), Suecia (100) y Dinamarca (100). Otro estudio elaborado por Soufangroup cifra en 2.500 los combatientes extranjeros de los países occidentales haciendo la yihad en su mayoría de la UE, Estados Unidas, Canadá, Australia y Nueva Zelanda y en 12.000 el número de personas de todo el mundo. - S. Martínez