parís - En la primera jornada de duelo en Francia en recuerdo de los doce muertos en el atentado de Charlie Hebdo, miles de agentes de las fuerzas del orden se encuentran movilizados para localizar a los supuestos autores de la masacre, identificados como los hermanos Cherif y Said Kouachi. Horas después de que el tercer implicado, Mourad Hamyd, se entregara a la policía, el primer ministro francés, Manuel Valls, informó de la detención la pasada noche de varias personas y reveló que los hermanos Kouachi habían sido objeto de seguimiento por las fuerzas del orden.

“Los servicios (secretos) los conocían y por eso se los seguía”, señaló Valls, aunque reconoció que Francia afronta “una amenaza terrorista sin precedentes” y que son “cientos” los individuos investigados por sus posibles vínculos con el terrorismo.

El jefe del Gobierno no quiso precisar si los dos sospechosos están localizados, pero aseguró que hay “miles” de agentes de las fuerzas del orden tras ellos. La publicación la pasada noche de las fotografías de Cherif y Said Kouachi, de 34 y 32 años, respectivamente, debe facilitar la búsqueda de los dos sospechosos que “susceptibles de ir armados y son peligrosos”, según la prefectura de París.

Según la web del diario Metronews, Cherif Kouachi fue juzgado en 2005 por formar parte de una célula de envío de yihadistas a Irak, que habría reclutado a una decena de jóvenes para ir a combatir a ese país. Condenado entonces a tres años de prisión, la mitad de los cuales quedaron exentos de cumplimiento.

Valls no dio detalles sobre los arrestados en las últimas horas, que algunas fuentes cifraron entonces en siete, relacionadas con el entorno de los hermanos Kouachi, uno de los cuales, al parecer, perdió su carné de identidad en el coche con el que huyeron de la sede de Charlie Hebdo. Lo que sí se sabe es que entre los arrestados figura Hamyd, el joven de 18 años que al saberse buscado se entregó en una comisaría de Charleville Mézières (noreste de París) hacia las 23.00 horas de la noche (22.00 GMT) al ver, en las redes sociales, que su nombre aparecía implicado en el ataque.

máximo nivel de alerta El Gobierno francés extendió ayer el nivel de alerta antiterrorista, el más elevado, a la región de Picardía, al noroeste de París, después que los dos principales sospechosos fuesen vistos en la zona. “Tras los acontecimientos, el primer ministro ha decidido ampliar a Picardía el nivel de alerta antiterrorista del Plan Vigipirate”, anunció el gabinete de Manuel Valls, en un comunicado.

El máximo nivel de alerta, en vigor en la región parisiense de Île-de-France desde el miércoles, implica un incremento de la vigilancia de las principales infraestructuras, así como de lugares y personas con mayor riesgo de sufrir un atentado.

Los hermanos Kouachi, principales sospechosos, estuvieron ayer en una gasolinera en una carretera de las proximidades de Villers Cotterêts, en el departamento de Aisne, uno de los tres que integran la región de Picardía. Agentes de cuerpos de élite de las fuerzas de seguridad, como el RAID y el GIGN, se han desplegado en la zona para tratar de localizarlos, apoyados por helicópteros. Además, en las entradas del norte de París se han dispuesto controles policiales y hay agentes armados con fusiles de asalto y equipamiento de protección, ante la posibilidad de que los presuntos autores del atentado intenten introducirse nuevamente en la capital.

El presidente francés, François Hollande, celebró una reunión de crisis con los miembros de su Gobierno implicados directamente en la gestión del atentado y amenazas terroristas. En un gesto de la necesidad de unión de los franceses ante uno de los ataques más graves a su democracia, el socialista Hollande invitó tras la reunión a su antecesor, el conservador Nicolas Sarkozy, para informarle de la situación.

Por su parte, el grupo yihadista Estado Islámico (EI) calificó ayer de “héroes” a los autores del atentado que se cobró la vida de doce personas, en un boletín informativo de su emisora de radio por internet Al Bayán. La noticia del ataque en París abrió el boletín, en el que un locutor anunció que “combatientes heroicos mataron a doce periodistas e hirieron a otros diez que trabajaban en la publicación francesa Charlie Hebdo, y eso en apoyo al profeta Mahoma”. Acusó que el semanario galo “no ha dejado de socavar la figura del profeta” desde el año 2003 y subrayó que, entre los fallecidos, “hay dibujantes de caricaturas que se burlaron del Islam”.

Pero también hubo condenas desde el mundo árabe y musulmán, caso de los gobiernos de Argelia, Mauritania, Túnez, Egipto, Líbano, Jordania, Marruecos, Irán, Turquía o Palestina. El papa Francisco recibió el mismo miércoles en audiencia a cuatro imanes franceses, quienes condenaron el atentado en París y animaron a la “mayoría silenciosa” musulmana a salir a la calle, reveló ayer la revista católica Roma Sette. Asimismo, varias organizaciones musulmanas francesas reclamaron a los imanes de “todas las mezquitas” del país que condenen “con la mayor firmeza” la violencia y el terrorismo “vengan de donde vengan” durante el sermón en el rezo del viernes.

manifestación, con o sin Le pen Mientras, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil francesa han convocado una gran manifestación en París el domingo en homenaje a las víctimas del atentado. La marcha inicialmente debía celebrarse el sábado, pero el gabinete del primer ministro, Manuel Valls, señaló que se había pospuesto un día para “garantizar las mejores condiciones de movilización y de seguridad”. Nicolas Sarkozy, presidente del primer partido de la oposición, la conservadora UMP y anterior jefe del Estado, señaló que se sumaría a la convocatoria “si se dan las condiciones”, tras ser recibido en el Palacio del Elíseo por el presidente, François Hollande.

También está por ver la participación del ultraderechista Frente Nacional (FN) en la que ya se ha bautizado como “marcha republicana”. Su presidenta, Marine Le Pen, ha sido invitada por Hollande para entrevistarse con él hoy y hablar sobre las consecuencias del ataque. - Efe