parís - Los dos presuntos autores de la masacre de París no son desconocidos ni para jueces ni para policías franceses. Cherif Kouachi había estado en la cárcel tras haber sido condenado por integrar una organización que reclutaba y enviaba yihadistas a Siria e Irak. Él mismo intentó volar para unirse a la lucha, pero fue detenido antes de lograrlo. Fue juzgado y condenado a tres años de cárcel. A los dos meses de su ingreso en prisión, el nombre de Cherif Kouachi ya aparecía en una lista de presos que planeaban la fuga del islamista argelino -los Kouachi son de ascendencia de este país- Smain Ait Belkacem, integrante del prohibido grupo armado islamista GIA.

Belkacem estaba en prisión cumpliendo una condena de cadena perpetua por perpetrar en 1995 un atentado en una parada del metro de París, provocando 30 heridos.

El rap, la noche, las chicas... Cherif, nacido en 1982, soñaba con ser cantante rap, le gustaba la noche, las chicas..., lo normal en un chico de su edad. Tanto él como su hermano pertenecen a esa segun- da generación de argelinos, los nacidos en Francia, a los que la metrópoli amontona en barrios marginales sumidos en la delincuencia y el paro, con pocas opciones de integración.

Cherif conoció al imán Farid Benyettou y desde aquel momento su vida cambió radicalmente. Dejó el rap y comenzó su adoctrinamiento. Cherif pasó a integrar la red de captación y envío de yihadistas para, en aquel entonces, la rama de Al Qaeda dirigida por Abu Musab Al Zarkawi.

en un programa de TV La televisión francesa, en un programa de TF3 sobre los jóvenes franceses que querían viajar a Irak, se fijó en Cherif. En el vídeo, aparecen citas en las que el joven reconoce sus tendencias yihadistas. “Farid me ha dicho que las escrituras aportan las pruebas del beneficio de los atentados suicidas. Está dicho en las escrituras que es bueno morir como mártir”.

“Gracias a los consejos de Farid mis dudas se desvanecieron. Estaba asustado pero no lo decía”,afirma.

Sobre su propósito de viajar a Irak, señala que, “es obvio que Farid me influye para que viaje, en el sentido que le dio una justificación a mi muerte próxima”. Su salida de la cárcel no disipó las sospechas policiales ya que se le consideraba cercano a Djamel Beghal, un islamista radical francés que pasó diez años en la cárcel por preparar atentados.

acusado de adiestramiento Las pesquisas policiales volvieron a sentar en el banquillo a Cherif, esta vez acusado de haber recibido adiestramiento por parte de Beghal. Un adiestramiento que podría haber servido para presuntamente cometer el sangriento ataque a la sede del semanario parisino, Charlie Hebdo. Una vez ante la justicia, su caso fue archivado.

La ficha policial difundida tras la matanza le describe como un individuo de cabeza afeitada y de forma ovalada, con perilla. Además se señala que es muy peligroso y que es probable que vaya armado.

El otro individuo que buscaba la policía francesa es su hermano Said, dos años mayor que él (nació el 7 de septiembre de 1980). En su ficha se informa de que al igual de Cherif es de nacionalidad francesa, tiene los ojos marrones, cabello corto de color castaño y una barba en forma de collar poco frondosa.