La Habana/Bogotá - El Gobierno de Colombia y las FARC han llegado a un acuerdo sobre las condiciones para liberar al general Rubén Darío Alzate y a otras cuatro personas más secuestradas por la guerrilla, anunciaron ayer en La Habana representantes de Cuba y Noruega, países garantes del proceso de paz. “Las liberaciones se llevarán a cabo a la mayor brevedad posible”, indica el comunicado leído por Rodolfo Benítez, representante de Cuba, y Rita Sandberg, de Noruega ante los medios de comunicación.

Además del general Alzate, serán liberados el cabo Jorge Rodríguez y la abogada al servicio del Ejército Gloria Urrego, todos capturados el pasado domingo en una zona conflictiva del departamento de Chocó, en el oeste colombiano.

El acuerdo también incluye la puesta en libertad para los soldados César Rivera y Jonathan Díaz, secuestrados por las FARC el pasado 9 de noviembre después de un combate en Arauca, en la frontera este con Venezuela.

Las condiciones para la liberación de estas cinco personas, que incluyen la participación de los países garantes y del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), serán similares a “las acordadas para otros tipos de operaciones realizadas en el marco del proceso de paz”, según el comunicado.

Cuba y Noruega agradecieron en la nota “la actitud constructiva” del Gobierno y de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), al tiempo que reiteraron su “firme apoyo” a los diálogos de paz, que cumplieron este miércoles dos años desde que se iniciaron en La Habana.

Los países garantes manifestaron que “continuarán contribuyendo en todo lo posible para lograr un acuerdo final para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera en Colombia”.

El secuestro el pasado domingo del general Alzate, el primer militar de tan alto rango que capturan las FARC, ha originado el mayor momento de crisis en esas negociaciones hasta el punto de que el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, decidió suspender los diálogos hasta la liberación del militar y del resto de secuestrados.

Sin contrapartidas Por su parte, el dirigente de las FARC Jorge Torres Victoria, alias Pablo Catatumbo, aseguró ayer que esa guerrilla no ha pactado recibir ningún beneficio a cambio de liberar a los cinco secuestrados que han capturado la última semana. “Desde el comienzo hemos dicho que es un gesto de buena voluntad, una contribución que busca generar un ambiente que aclimate la situación para generar las conversaciones más tranquilamente”, afirmó en entrevista con RCN Radio desde La Habana Catatumbo, jefe negociador de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

El general Rubén Darío Alzate, junto al cabo Jorge Rodríguez y la abogada Gloria Urrego, que permanecen en poder de la guerrilla desde el domingo, serán liberados “lo antes posible, pero hay que tener en cuenta que los tiempos de Colombia son distintos a los de La Habana. Nuestra voluntad es que se haga lo mas pronto posible”, sostuvo.

Por el secuestro del general, el presidente Juan Manuel Santos suspendió los diálogos de paz, que el miércoles cumplieron dos años en medio de la peor crisis desde el inicio de las conversaciones.

El negociador de las FARC insistió en que la retención de Alzate no es un secuestro sino “una acción militar” consecuencia de negociar en medio del conflicto armado.

“Lo mismo habría ocurrido si un comandante de las FARC está en un caserío y lo detiene la autoridad militar”, argumentó Catatumbo, que dijo que, “para cualquier analista imparcial que conozca de situaciones como esta no sería un secuestro”.

El guerrillero añadió, además, que haber acordado la liberación cuatro días después de haber capturado al general y sus acompañantes “demuestra que hay un gran cadena de mando” en el grupo, que mantiene a la mayoría de sus altos mandos en La Habana. - Efe