Washington - El secretario de Justicia de Estados Unidos, Eric Holder, anunció ayer que su departamento ha iniciado una “investigación penal” sobre el asesinato del periodista y fotógrafo estadounidense James Foley, decapitado por un integrante del grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Las fuerzas de seguridad del Reino Unido creen que el verdugo del periodista se hace llamar John y habla con acento de Londres, reveló ayer la versión digital del diario The Guardian. La inteligencia del Reino Unido trabaja con la hipótesis de que se trata de un británico que viajó a Siria para unirse a los extremistas. Este hombre sería el líder de un grupo de yihadistas británicos que ha secuestrado a varios extranjeros.
Los yihadistas del Estado Islámico pidieron en un principio 100 millones de euros por la liberación del periodista. Philip Balboni, presidente de GlobalPost, indicó que la cifra fue solicitada al medio de comunicación y a la familia de Foley. - Efe
