bagdad. El comando de operaciones de la provincia iraquí de Anbar anunció que la Policía y las tribus de la localidad de Ramadi retomaron el control de la ciudad tras expulsar del centro de la misma a los milicianos del Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS), vinculados a la organización terrorista Al Qaeda.
Horas antes el Ejército comenzó un asalto en el norte y el sur de la ciudad para expulsar a los milicianos del ISIS, para el cual los soldados habían pedido la ayuda de las tribus locales para negociar una salida pacífica al asedio, como última opción antes de una incursión militar.
El ISIS, que ha reivindicado la autoría de numerosos atentados contra las fuerzas de seguridad en los últimos meses en Irak, se hizo la semana pasada con el control de Ramadi y Faluya, donde aún permanecen.
La salida de las tropas estadounidenses del país y el conflicto en Siria, con fuertes connotaciones sectarias, ha exacerbado las tensiones entre la comunidad suní y el Ejecutivo del primer ministro chií Nuri al Maliki, que tienen como puntos de fricción un sistema judicial que discrimina sistemáticamente a los suníes y la exclusión de esta comunidad de los altos cargos de la Administración iraquí.
Elrepunte de la violencia confesional y de los atentados terroristas, que causaron durante 2013 la muerte de 8.868 personas, de los que 7.818 eran civiles, según cifras de la ONU, también dejó ayer varias víctimas de ambos lados.
milicianos muertos Por una parte, diez milicianos del Estado Islámico de Irak y Levante, grupo vinculado a Al Qaeda, murieron ayer en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad iraquíes y con residentes en Faluya y Ramadi, en la provincia occidental de Al Anbar, según informó una fuente policial.
Cinco de los milicianos murieron en Ramadi, donde también fueron heridos otros dos, a los que detuvo la Policía.
"Se registraron fuertes enfrentamientos entre los residentes y los milicianos del Estado Islámico y se consiguió matar a tres francotiradores del Estado Islámico y quemar tres coches en la zona de Albu Bali, en el este de Ramadi", agregó la fuente de seguridad.
Por otro lado, al menos diez agentes de la Policía iraquí murieron y otros cinco resultaron heridos en diferentes ataques perpetrados ayer en las provincias de Salahudin, al norte de Bagdad, y de Diala, en el este de Irak, informó a Efe una fuente de seguridad.
Siete de los policías murieron en un ataque perpetrado por desconocidos con ametralladoras contra una patrulla de la policía federal, al este de Samarra, 120 kilómetros al norte de Bagdad.