estrasburgo (Francia). La niña paquistaní Malala Yousafzai, que sufrió un intento de asesinato por los talibán paquistaníes por defender el derecho de las niñas a la educación, fue elegida ayer ganadora del Premio Sajarov a la Libertad de Conciencia de la Eurocámara, que recogerá el próximo 20 de noviembre en sesión plenaria en Estrasburgo.
Malala partía como favorita dado que su nominación fue promovida por los tres grupos mayoritarios en la Eurocámara: el grupo del Partido Popular Europeo, el grupo de los Socialistas y Demócratas y la Alianza de Liberales y Demócratas.
La pequeña tenía apenas once años cuando comenzó su lucha en defensa del derecho de educación de las niñas en el valle de Swat, en Pakistán, a través de su blog que escribía con pseudónimo desde 2009. El intento de asesinato por parte de los talibán, que le dispararon en la cabeza en octubre de 2012, le convirtió en símbolo de la lucha de los derechos de las mujeres y el acceso a la educación universal.
El líder del grupo de los liberales y exprimer ministro belga, Guy Verhofstadt, aseguró que se requiere "un ser humano excepcional para enfrentarse a un régimen como el de los talibán paquistaníes" y recordó que "las recientes amenazas renovadas contra la vida de Malala muestran que aquellos que han intentado hacerle daño están cada vez más desesperados mientras la atención del mundo se fija en esta joven mujer excepcional. Es la galardonada más merecedora del premio Sajarov y se merece la nominación al premio Nobel de la Paz".
"la voz de los niños" Malala agradeció al Parlamento Europeo el premio y aseguró que representa una gran oportunidad para seguir "dando voz a los niños que no tienen voz". "Muchas gracias a la Unión Europea, es un gran honor recibir este premio. No es solo un reconocimiento, es también un espaldarazo a mi trabajo en favor de la educación", dijo Malala en Nueva York tras anunciarse el galardón. La joven activista, que visita Nueva York para promocionar su nuevo libro Yo soy Malala, declaró a que ahora quiere seguir trabajando sobre el terreno para "dar voz a los niños que no tienen voz". La candidatura de Malala se ha impuesto a los otros dos finalistas que optaban al premio este año, entre ellos el ex analista de la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) Edward Snowden, que filtró el espionaje masivo de los servicios de inteligencia estadounidenses. También optaban al galardón este año tres disidentes bielorrusos que fueron detenidos en las protestas pacíficas de diciembre de 2010 en contra de la polémica reelección de Alexander Lukashenko. La Eurocámara concede este galardón, dotado con 50.000 euros, desde 1988 a personas u organizaciones que se hayan distinguido por su lucha contra la injusticia y la opresión en el mundo.