El presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta, descartó ayer que el grave incendio declarado el pasado miércoles en Aeropuerto Internacional Jomo Kenyatta (JKIA) de Nairobi fuera causado por un atentado terrorista. Según explicó tras una visita al aeródromo, "no hay pruebas", y tampoco se han encontrado restos de artefactos explosivos.