la haya. La sala de Apelación del Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) anuló ayer la absolución al exlíder serbobosnio Radovan Karadzic de un caso de genocidio en varios municipios de Bosnia Herzegovina.
Tras esa decisión del TPIY, la acusación volverá a sumar ese cargo al ya existente de genocidio en Srebrenica, una masacre contra musulmanes bosnios de la que precisamente ayer se cumplieron 18 años. "Las pruebas tomadas en su más alta consideración podrían indicar que Karadzic y presuntos miembros del ejército serbobosnio poseían la intención de cometer genocidio, por lo que ninguna sala del tribunal razonable podría haber concluido lo contrario", dijo el juez Theodor Meron en la lectura de la sentencia.
La decisión acepta así la petición de la fiscalía de que se mantuvieran dos cargos de genocidio contra Karadzic, uno por Srebrenica y otro por el genocidio en otros municipios bosnios, aunque este último había sido retirado por la sentencia pronunciada hace casi un año por la sala de primera instancia del TPIY.
La acusación de genocidio es según los expertos una de las más difíciles de demostrar porque la fiscalía debe poder asegurar que el presunto autor o responsable del crimen tenía la intención de cometerlo. Sobre la intencionalidad del cargo de genocidio los jueces recordaron en su sentencia de hace un año que ese factor no tiene que demostrarse necesariamente con pruebas directas, sino a través de factores como el "contexto general" del caso.
Sin embargo, la sala de Apelación se refirió ayer a las condiciones inhumanas a las que los musulmanes eran sometidos en las prisiones, que estaban "superpobladas" hasta el límite de que los detenidos "tenían que dormir de pie", como elementos probatorios de un presunto crimen de genocidio.
pruebas indirectas Además los jueces especificaron que la fiscalía presentó "extensas pruebas indirectas" para seguir incluyendo el cargo de genocidio en varios municipios de Bosnia Herzegovina. Ayer se conmemoró en Bosnia y otros lugares, entre ellos La Haya, el 18 aniversario del genocidio de Srebrenica, en el que 8.000 musulmanes varones fallecieron a consecuencia de una ofensiva serbobosnia. En el momento del ataque serbobosnio a Srebrenica en 1995 ese enclave estaba protegido por fuerzas internacionales de paz, los llamados "cascos azules", holandeses, por lo que este genocidio se vive con traumatismo en Holanda. El gobierno neerlandés liderado entonces por el laborista Wim Kok dimitió en 2002 tras escuchar un informe holandés en el que se puso de manifiesto el fracaso de la comunidad internacional para evitar la masacre en Srebrenica.
El TPIY, que abrió el juicio a Karadzic en octubre de 2009, acusa al exlíder serbobosnio de crímenes de guerra contra la humanidad presuntamente cometidos durante la guerra civil en Bosnia, entre 1992 y 1995, incluyendo esa matanza de Srebrenica y el asalto a Sarajevo. Karadzic fue capturado el 21 de julio de 2008 cerca de Belgrado, doce años después de que el TPIY ordenara su detención, y pocos días después fue transferido a La Haya.
En julio de 1995, Karadzic fue acusado por el TPIY de 16 cargos, uno por genocidio y tres por crímenes contra la Humanidad, en relación con el cerco de Sarajevo, en el que murieron 10.000 personas, incluidos 1.600 niños, y hubo casi 30.000 desaparecidos. Meses después Karadzic fue acusado de otros 20 cargos, uno por genocidio y nueve por crímenes contra la Humanidad, en relación con la matanza de Srebrenica, en la que fueron asesinados más de 7.000 hombres y niños.