ATenas. El presidente francés, François Hollande, confirmó ayer el secuestro en el norte de Camerún de tres adultos y cuatro menores galos, todos miembros de una misma familia, que hacían turismo en el país. Asimismo, el mandatario galo atribuyó el rapto a "un grupo terrorista que conocemos bien" y que tiene su base en Nigeria. Es por ello que, según Hollande, lo más probable es que los secuestradores lleven allí a los rehenes. "Estamos haciendo lo posible por evitar que sean retenidos en ese país", aseguró Hollande desde Atenas, donde ayer se encontraba de visita oficial.

La familia fue secuestrada alrededor de las 07.00 horas de ayer en Dadanga, una aldea a unos 10 km de la frontera con Nigeria, cuando salía de visitar el Parque Natural Waza, donde había pasado la noche. Esta zona suele ser muy visitada por turistas occidentales, por lo que el mandatario francés recomendó a sus conciudadanos que eviten viajar a zonas de conflicto y países limítrofes. "Los secuestrados, según nos han informado nuestras fuerzas de seguridad, circulaban en motocicleta cuando fueron interceptados a la salida del Parque Waza y les llevaron a la fuerza a la zona de Nigeria", explicó, por su parte, el ministro camerunés de Comunicación, Issa Chiroma Bakary.

Esta es la primera vez que se perpetra un secuestro de extranjeros en esa zona de Camerún, donde desde el año pasado hay una fuerte presencia de militares para prevenir que el grupo terrorista nigeriano Boko Haram, muy activo en Nigeria, se adentre en territorio camerunés. Mientras, en diciembre de 2012, un ingeniero francés fue secuestrado en Nigeria, en un acto reivindicado por el grupo islamista nigeriano Ansaru.

El secuestro de estos siete franceses -que se suman a los ocho galos que permanecen retenidos en el norte de África-, se produce mientras el Gobierno de París continúa con su intervención militar en Mali, iniciada en pasado 11 de enero, para luchar contra los grupos islamistas que controlan el norte del país y que amenazan la seguridad de toda África occidental.