a pesar de que el huracán Sandy hace ya más de una semana que pasó por Estados Unidos todavía siguen notándose sus consecuencias en varios estados como Nueva York o Nueva Jersey. Muchos de los centros de votación siguen afectados por las inundaciones, cortes de energía o daños en la estructura, mientras que otros han sido usados para albergar a los damnificados. Lo que ha provocado que se tuviera que cambiar de lugar.

La ciudad de Nueva York y su área metropolitana es una de las zonas más afectadas. Sólo alli hay más de un millón de personas que sigue sin luz y varias decenas de miles han sufrido la pérdida o daños graves en sus casas a causa del huracán.

Un fenómeno que no distingue entre viviendas y centros electorales. En la Gran Manzana 61 centros de voto han tenido que ser trasladados. A pesar de todo, los habitantes de esta ciudad contaron con más de 1.3000 centros y cerca de 36.000 personas para ayudar a los electores con el proceso.

En el sur de State Island, Far Rockaway y Coney Island, tres de las zonas más afectadas, la Junta Electoral tuvo que fusionar 66 centros de votación. Esto provocó que muchos ciudadanos tuvieran que desplazarse para poder llegar al lugar donde tenía que votar por lo que se habilitaron autobuses para que se pudieran desplazar.

Los habitantes de Nueva York eran conscientes de que la jornada electoral iba a ser diferente al resto por lo que desde primera hora de la mañana se produjeron largas colas para votar. La espera se hizo complicada bajo el frío del amanecer neoyorquino pero a partir de las 06.00 hora local (11.00 GMT), momento en el que se abrieron los colegios electorales, la votación procedió con fluidez y las esperas en las filas se redujeron mucho.

Desde la junta electoral sabían que podía haber problemas por lo que pidieron tranquilidad ante los posibles imprevistos que pudieran surgir. "Cada voto será contado", afirmó Juan Carlos Polanco, quien representa al condado de El Bronx en la Junta Electoral de la ciudad de Nueva York.

Aunque la jornada ayer trascurrió sin problemas las Juntas Electorales sabían lo importante de esta votación y estaban preparadas incluso para que se pudiera votar si faltaba la electricidad.