El presidente de EEUU, Barack Obama, ha reservado un espacio en su agenda de hoy en Chicago (Illinois) para jugar al baloncesto, una de sus aficiones favoritas y todo un ritual para el mandatario en los días de elecciones. De hecho la costumbre tiene algo de superstición ya que la única excepción, ocurrida en noviembre de 2008, Obama perdió un proceso de primarias. Sin embargo jugar a baloncesto no asegura la victoria del demócrata ya que también se han dado casos donde el actual presidente ha perdido a pesar cumplir con la tradición.