Los Ángeles (EEUU). Oculto tras una larga lista de pseudónimos y en paradero desconocido, el hombre responsable del vídeo que ha soliviantado al mundo islámico se ha convertido durante las últimas horas en la persona más buscada de EE.UU. por los periodistas, afanados en ponerle cara al escurridizo realizador. "¿Quién es Sam Bacile?" se preguntaba ayer la CNN en su página web donde recopilaba la información más relevante publicada hasta la fecha sobre el autor de La inocencia de los musulmanes, un filme amateur que ridiculiza al profeta Mahoma y ha sido el detonante de ataques mortales a misiones diplomáticas de EEUU

Resulta difícil precisar su identidad real, aunque a estas alturas, todo apunta a que Sam Bacile es tan solo un alias, lo mismo que Nicola Bacily, Mark Basseley Youssef, Erwin Salameh, Ahmad Hamdy y otros tantos que tienen como nexo común a Abanob B. Nakoula y Nakoula Basseley Nakoula.

Esos dos nombres de apellido Nakoula figuran en los registros oficiales bajo una misma dirección, una calle sin salida de un barrio residencial del municipio de Cerritos, en el condado de Los Ángeles, cuya tranquilidad fue alterada desde la noche del miércoles por la prensa. Decenas de reporteros, fotógrafos y camiones de televisión se han acercado hasta el lugar a la caza y captura de una instantánea o un comentario del misterioso sujeto a quien se le atribuyen dos entrevistas contradictorias antes de desaparecer. En una de ellas, se presentó como Sam Bacile, de 52 años, dijo ser un israelí-estadounidense que consideraba el Islam un "cáncer" y que recaudó 5 millones de dólares de donantes judíos para grabar su película que, por los vídeos colgados en YouTube, parece obra de videoaficionado.

antecedentes policiales En la otra, aseguró llamarse Nakoula, tener 55 años, y ser colaborador de Sam Bacile. Se declaró ser cristiano copto y haber participado únicamente en labores de producción de la polémica cinta. Sam Bacile no figura en las bases de datos de referencia de la industria de Hollywood ni como director, ni como guionista. Nakoula Basseley tampoco, aunque sí aparece en los archivos federales como un convicto por un fraude bancario cometido en 2009 que conllevó pena de cárcel.

El FBI confirmó que había contactado esta semana con Nakoula Basseley ante el temor de que sufriera represalias por el filme y el individuo terminó por llamar a la Policía la noche del miércoles al sentirse incomodado, no por extremistas islámicos si no por los periodistas. Desde el miércoles, no se ha vuelto a saber del autor de la película que supuestamente dura 2 horas y se grabó en el verano de 2011 en California con un elenco formado por 60 actores a los que presuntamente engañó.

"embaucados" Los miembros del reparto mostraron su perplejidad al conocer el resultado final del filme y manifestaron que fueron "embaucados sobre su intención y propósito", según un comunicado difundido por Los Angeles Times que constató que el equipo de la película pensó que rodaba un largometraje de aventuras inspirado en el pasado árabe que llevaba por título Desert Warriors y en el que no había ningún personaje llamado Mahoma, algo que se modificó en la postproducción sin conocimiento de los actores. El Islam prohíbe la reproducción de la figura de su profeta, mucho más su burla.

Mientras, la paz reina en la casa de Nakoula, cuya entrada preside una estatua de la Virgen que sostiene entre sus brazos el cuerpo de Jesus crucificado.