Washington. La CIA desmanteló en las últimas semanas un plan de Al Qaeda en la Península Arábiga (AQAP, en inglés) para cometer un atentado suicida contra un avión, confirmó ayer la Casa Blanca. El presidente de EE.UU., Barack Obama, fue informado en abril de la trama terrorista, según informó la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional (NSC) Caitlin Hayden, quien aseguró que "no hubo peligro para el público". El plan incluía el uso de una versión más sofisticada del artefacto que ocultó en su ropa anterior el joven nigeriano Umar Farouk Abdulmutallab, que en la Navidad de 2009 trató de volar un avión en ruta desde Amsterdam a Detroit (EEUU). Las autoridades estadounidenses se han negado a proporcionar más detalles sobre el plan por razones de seguridad. No se conoce dónde fue interceptado el artefacto con el que se pretendía cometer el atentado. Solo se ha divulgado que el explosivo estaba "en tránsito" cuando fue interceptado, pero no en un aeropuerto ni cerca de un avión.

La senadora demócrata Dianne Feinstein, que encabeza el Comité de Inteligencia del Senado, dijo a los periodistas que había sido informada del hallazgo de un dispositivo "no detectable" que iba a ser usado para atentar contra una avión de pasajeros con destino a Estados Unidos.

Explosivo 'conocido' La Oficina Federal de Investigaciones (FBI) explicó en un comunicado que analiza el explosivo y que es similar a otros que han sido usados previamente por la mencionada organización para llevar a cabo ataques terroristas "contra aviones" y otros objetivos. El FBI indicó que el artefacto fue incautado con ayuda de sus socios internacionales en el "extranjero", sin detallar su procedencia, y asegura que "nunca presentó una amenaza para la seguridad pública".

Una fuente oficial de la lucha antiterrorista, que habló en condición de anonimato, indicó a CNN que el artefacto encontrado era "no metálico" y estaba fabricado para ser usado por un suicida en un avión.

Según indicó el analista de terrorismo de CNN Paul Cruickshank, las autoridades están analizando exactamente cómo fue hecho y cuáles son las diferencias del empleado en el fallido atentado de 2009. Cruickshank señaló que Umar Farouk Abdulmutallab portó el dispositivo en su ropa interior en un largo viaje, lo que pudo hacer que no funcionara.