TOKIO. La cifra oficial de muertos por el devastador terremoto del viernes en la costa noreste de Japón asciende ya a 801 y los desaparecidos son 678, según el último cómputo facilitado hoy por la Policía nipona.

Ese número se verá incrementado con el paso de las horas, pues las autoridades locales de varias provincias han alertado de que hay varios miles de personas sin localizar en algunos pueblos arrasados por el tsunami que siguió al seísmo.

Un total de 1.167 personas se encuentran desaparecidas solo en la provincia de Fukushima (noreste de Japón), una de las más devastadas junto a Miyagi e Iwate, según la agencia local Kyodo.

Además, las autoridades de Miyagi alertaron anoche de que siguen sin localizar a 9.500 habitantes del pueblo de Minamisanriku, más de la mitad de su censo y que fue arrasado por la fuerza del mar.

Según Kyodo, más de 300 cadáveres han sido encontrados en la costa de Miyagi e Iwate.

El Gobierno japonés ha calificado de desastre "sin precedentes" el seísmo del viernes, cuya magnitud ha sido aumentada a 9 grados en la escala Richter, uno de los más fuertes de la historia.

El terremoto fue seguido de un tsunami con olas de hasta diez kilómetros que empeoró todavía más la catástrofe.

El número de evacuados supera los 300.000 en seis provincias japonesas y son al menos 20.820 los edificios destruidos, de acuerdo con el último balance.

El Gobierno nipón anunció hoy que movilizará en las próximas horas hasta 100.000 militares para las operaciones de rescate en la costa noreste del país, donde algunos pueblos han sido prácticamente barridos del mapa.