MADRID. La Embajada de España en Japón trata de localizar a nueve españoles que constan como residentes en el país, tres de ellos de una misma familia, en la provincia de Miyagi, una de las más afectadas por el terremoto de 8,8 grados en la escala de Richter, y otras seis en Ibaraki, a 300 kilómetros de la capital.

Así lo ha confirmado el embajador de España en Japón, Miguel Ángel Navarro, en declaraciones a la cadena Ser, quien ha señalado que todos ellos podrían estar en centros de asistencia, según le han comunicado a él las autoridades niponas, que están llevando a cabo el recuento de todas las personas que han sido acogidas en estos lugares.

Además de los españoles con los que la Embajada trata de contactar en Miyagi, espera también encontrar a otros seis con domicilio en Ibaraki, donde en total hay registrados veinticuatro residentes españoles, pero diecisiete de los cuales ya han sido localizados y están "perfectamente", según Navarro.

"No sabemos si están en un centro de evacuación", ha dicho, o podrían haberse desplazado a otro punto del país con motivo del comienzo del fin de semana.

La Embajada no tiene constancia de que haya ningún ciudadano con pasaporte español, salvo que pudiera haber algún visitante, en la zona donde se ubica la planta nuclear de Fukushima (norte de Tokio), en la que hoy se ha producido una explosión y ha causado cuatro heridos después de que el nivel de radiactividad aumentara de forma alarmante tras el violento seísmo.

Precisamente, preguntado sobre si hay un plan de evacuación de nacionales ante un posible riesgo nuclear, el embajador ha señalado que en este momento es difícil de contestar, aunque ha asegurado, por otro lado, que no ha visto que haya españoles deseando abandonar Japón ante esta situación, sino que los que se dirigen al aeropuerto es porque tienen un billete de avión de vuelta.

Siguiendo con el recuento de los ciudadanos españoles que se encuentran en Japón, ha confirmado que también están los seis trabajadores españoles que estaban de paso en la ciudad de Sendai, una de las más afectadas, y ahora mismo están en un hotel a la espera de regresar a Madrid.

Otros dos residentes en Komori están igualmente localizados, así como los seis que viven en Nagano y los siete que residen en Nigata, en el oeste del país.