PAMPLONA. Los manifestantes libios esgrimen desde el pasado 17 de febrero en que comenzaron las revueltas en varias ciudades del país esa enseña como símbolo de sus ansias de cambio, además de utilizarla en las caricaturas en las manifestaciones contra el poder actual.

La bandera tricolor con la media luna y la estrella fue instaurada por el rey Idris al Senusi cuando el país obtuvo la independencia de Italia el 24 de diciembre de 1951.

Tras el derrocamiento del rey Idris I cuando se encontraba en el extranjero el 1 de septiembre de 1969, Gadafi la sustituyó por otra enteraente de color verde, el que identifica al islam.

De los 22 países miembros de la Liga Árabe solo tres adoptaron ese color para sus enseñas: Libia, Arabia Saudí y Mauritania.

Pero, a diferencia de la libia, la saudí lleva la inscripción en árabe de "No hay más Dios que Alá y Mahoma es su Profeta" y una espada, y la mauritana tiene una media luna y una estrella.

Gadafi, para quien ese color es todo un símbolo, lo usó también para su "Libro verde", en el que define su idea de una república gobernada mediante comités populares.

Precisamente, uno de sus ejemplares "verdes" fue el que esgrimió en su discurso del pasado día 22 para amenazar a los opositores contra un régimen que dura 41 años, si no cesan las protestas.