PARÍS- Unos 140.000 franceses salieron a la calle en nueve marchas convocadas en todo el país para protestar contra la reforma de las pensiones del presidente Nicolas Sarkozy, según estimaciones del gobierno, lo que supone una afluencia menor que la acostumbrada en las últimas semanas.
Los organizadores hablaron, sin embargo, de un millón de personas.
El mes pasado las protestas sacaron a la calle a millones de franceses, provocando el caos y problemas en el suministro de gasolina, tras el bloqueo de depósitos de crudo.
Sin embargo, muchos franceses parecen pensar que las protestas han dejado de tener sentido desde que el Parlamento aprobó la reforma de las pensiones hace una semana y media.
La ley, que entrará en vigor a mediados de noviembre, prevé un aumento de la edad de jubilación de los actuales 60 a los 62 años paulatinamente hasta el año 2018.