En Vitoria se vuelve a hablar de sacar a bicis y patinetes eléctricos de las aceras. El gobierno municipal aborda una nueva ordenanza con el objetivo de proteger al peatón. Se abre el debate y los vitorianos tomamos posiciones. En esta discusión la misma persona puede tener diferentes puntos de vista en función de si habla como peatón, ciclista o conductor, condiciones que muchos compatibilizan. Y por supuesto hay quienes aseguran hacerlo todo bien siempre. La autocrítica se antoja ineludible en favor de la buena convivencia en las calles y no pasa nada por admitir las pifias que todos cometemos. Hace falta propósito de enmienda pero también sentido común, porque no es lo mismo circular a 70 por hora por Domingo Beltrán que hacer eslalon entre peatones por la calle Diputación o cruzar en rojo la Avenida. Llevo tiempo pensando que el peatón es el último mono en esta jungla de asfalto y últimamente ese lamento se ha convertido en cabreo. No es normal caminar por Vitoria pendiente de que alguien te pueda llevar por delante y si vas con txikis la tensión se multiplica. Sí, me hago mayor... pero no exagero. Algunos dicen que la ordenanza actual ya protege al peatón pero que no se cumple. La nueva norma no puede caer en ese mismo error. Herramientas hay para que así sea.
