Este asador que se sitúa en las calles adoquinadas del pueblo costero no posee fecha exacta de nacimiento, pero se cree que tiene alrededor de los noventa años. Manterola marchó a realizar sus estudios a la escuela de cocina de la Casa de Campo de Madrid y tras pasar por la Euskal etxea de la citada ciudad, junto al gran Luis Irizar, le tocó volver a casa a coger las riendas junto a su madre.
No en vano, sus periplos también han tenido experiencias televisivas como presentadora en el programa Txoriene de ETB1 o en los radiofónicos de Euskadi Irratia.
Nos atiende para esta entrevista en formato corto para saber de sus gustos y vivencias personales en el mundo gastronómico:
¿Un plato de la infancia?
Souflé.
¿A qué restaurantes le gusta ir a disfrutar?
Donde haya buen producto.
¿Un olor?
La parrilla.
¿Un sabor?
Salado con remate de dulce.
¿Qué comería en su última cena?
Huevos fritos.
¿Y para beber?
Champagne.
¿Atún o bonito?
Bonito.
¿Por qué esa elección?
Me gustan los dos, pero aprecio la vuelta del bonito.
¿Algún corte en particular?
Ventresca.
¿Un ingrediente para el verano?
Guindillas de Ibarra.
¿Un plato de la cocina vasca para maridar con el verano?
Marmitako.
¿Cuál es la mejor pieza de pescado para poner a asar a la parrilla?
Para rodaballos o meros me gusta que las piezas sean grandes.
¿Un viaje gastronómico que haya disfrutado?
Japón.
¿Un viaje soñado gastronómico que le gustaría visitar?
Perú y más cerca, Cádiz.
¿Un personaje culinario referente?
Mikel Zeberio, es pura sabiduría
¿Un vino memorable que ha disfrutado en un restaurante y se ha quedado en su recuerdo?
Una botella de Imperial que me recomendó Pedro Arregi en el restaurante Elkano.
¿Un restaurante por su calidad-precio últimamente?
El Suharri de Hernani.
