La escultura vegetal de la Plaza de la Virgen Blanca ha vuelto esta mañana a su lugar habitual, completamente renovada tras las labores de restauración llevadas a cabo en las últimas semanas. A primera hora del día, el personal técnico del Departamento de Espacio Público y Barrios ha completado el traslado desde el vivero municipal, donde se ha realizado una intervención integral para devolver todo su esplendor a este símbolo de la ciudad.
Es una seña de identidad para quienes vivimos aquí y un icono para quienes nos visitan
Durante este tiempo, se ha sustituido por completo el césped, revisado el sistema de riego y saneado la estructura interna, con el objetivo de que la escultura luzca perfecta de cara a la Semana Santa y a las miles de personas que transitan por el centro estos días.
“La escultura vegetal de Vitoria-Gasteiz es mucho más que un elemento decorativo: es una seña de identidad para quienes vivimos aquí y un icono para quienes nos visitan. Recuperarla en perfecto estado es una muestra del cariño que esta ciudad tiene por sus espacios públicos”, ha señalado la teniente de alcaldesa y concejala de Espacio Público y Barrios, Beatriz Artolazabal.
Artolazabal ha querido agradecer expresamente “el magnífico trabajo realizado por el personal técnico municipal, cuya profesionalidad y dedicación han hecho posible esta restauración en tiempo y forma. Gracias a su labor, la escultura vuelve a la Virgen Blanca con toda su belleza”.
Instalada en 2012 para conmemorar el reconocimiento de Vitoria-Gasteiz como European Green Capital, esta escultura se ha convertido en la imagen más fotografiada de la ciudad.