La Audiencia de Álava ha condenado a dos años de prisión y a devolver 28.050 euros a una empleada de hogar que vació poco a poco la cuenta bancaria de la mujer dependiente a la que cuidaba en Vitoria.

El juicio por este delito se ha celebrado este miércoles en la Audiencia y en él se ha llegado a un acuerdo de conformidad entre las acusaciones y la defensa.

La acusada, con la excusa de ayudar a la víctima en la gestión de los gastos diarios, consiguió el acceso a las tarjetas bancarias de la víctima.

Con estas tarjetas, entre enero de 2020 y julio de 2021, efectuó en cajeros más de 130 extracciones de dinero, en pequeñas cantidades, entre los 100 y los 350 euros, hasta un total de 39.450 euros, de manera que la cuenta de la víctima se quedó en negativo.

La Fiscalía ha calculado que los gastos reales de la víctima en esa época eran de unos 600 euros al mes, es decir, 11.400 euros en todo el periodo de la estafa, de manera que considera que el resto, 28.050 euros, se los quedó la acusada.

Multa

Inicialmente, la Fiscalía pedía 3 años y 10 meses de cárcel para la mujer y lo mismo para su marido por sendos delitos de estafa continuada, pero hoy ha acordado que el marido no tuvo participación directa en las disposiciones de efectivo, aunque se aprovechó de los resultados.

El acuerdo ha consistido en condenar a la mujer a dos años y una multa de 3.000 euros, y absolver al marido del delito de estafa, pero ambos tendrán que afrontar conjuntamente la indemnización a la víctima, que se ha fijado en los 28.050 euros, cantidad que se calcula que se quedaron.

Para ello afrontarán un plan de pagos, con 400 euros abonados hoy y 300 euros al mes en el futuro, hasta los 28.050 euros sustraídos.