Dos jornadas de huelga esta semana pondrán en jaque a cientos de familias en Vitoria.
Padres y madres ya se están reorganizando desde esta tarde de lunes ante el anuncio de que el martes y el jueves no abrirán las ludotecas en la capital alavesa.
Lo que sucede es que esta semana no hay clase en los centros escolares, es la Semana de Pascua, y muchas familias contaban con estos servicios para dejar a sus hijos por las mañanas y no faltar al trabajo.
Y es que medio millar de trabajadores están llamados a secundar dos jornadas de huelga el martes y el jueves, el 2 y el 4 de abril, convocados por ELA, LAB y CCOO.
Son aproximadamente unos 500 educadores, monitores y guías que pertenecen a empresas subcontratadas del Ayuntamiento de Vitoria e instituciones alavesas, y que a través de licitaciones son las encargadas de gestionar servicios tan diversos e importantes para la ciudadanía como bibliotecas, ludotecas, Ataria, museo Artium, oficina de Turismo, las Salinas de Añana, centros de interpretación de parques como Izki, el programa Xtraklub para adolescentes, salas de encuentro, los udalekus y guías, entre otros.
Esto es, cualquier tipo de gestión de equipamientos, programas y acontecimientos de animación sociocultural y cultural de educación en el tiempo libre en Álava.
¿Por qué van a la huelga 500 trabajadores en Vitoria?
La inflación ha terminado el año 2023 con una subida del 3,1%. ¿Qué significa? Que los precios siguen siendo muy altos y que hay trabajadores que siguen peleando y negociando para mejorar sus condiciones y recuperar el poder adquisitivo que están perdiendo mes a mes.
Hay medio millar de alaveses que no han logrado compensar la pérdida que está generando la elevada inflación, lo que les va a suponer un notable retroceso de los sueldos.
Por eso y convocados por ELA, LAB y CCOO, el pasado 13 de febrero ya se manifestaron en pleno centro de Vitoria, en la Plaza de la Virgen Blanca, bajo el lema 'sin un convenio digno no habrá servicio' ('hitzarmen duinik gabe, zerbitzurik ez').
Sin convenio provincial desde finales de 2022
Hace referencia al convenio provincial de ocio educativo y animación sociocultural que terminó su vigencia en Álava en diciembre de 2022, y que la parte social y la patronal (Zeharka) están en plena negociación para actualizarlo y para que "recoja unas condiciones dignas y estabilidad económica de la plantilla".
Tal y como han explicado las centrales, después de varias reuniones "el acercamiento en muchos puntos económicos es nulo" en este tercer convenio provincial que negocian para un sector donde trabajan alrededor de medio millar de personas en Vitoria y Álava, sin olvidar todos los contratos temporales que se hacen de cara al verano.
Este sector "necesita mejoras sustanciales" en las condiciones laborales, por eso no apoyará ningún convenio que no contemple esas mejoras. "La última propuesta de la patronal es decepcionante, sobre todo en materia salarial, de jornada y otros derechos".
Ante esta precaria situación laboral, los trabajadores han sido llamados a secundar dos jornadas de huelga en los sectores de las ludotecas, parketxes, bibliotecas, museos, oficina de Turismo, salas de encuentro, Salinas de Añana, Ataria, etc...
Salarios sin vincular al IPC
Desde los sindicatos ELA, LAB y CCOO tienen muy claro que "están muy lejos de poder llegar a un acuerdo ya que la actitud de la patronal, que tiene que hacer un esfuerzo por acercarse a las peticiones de las trabajadores, genera muchas dudas y preocupación en la mesa negociadora".
Concretamente, los sindicatos han explicado que en cuanto las subidas salariales, la patronal las desvincula del IPC, algo totalmente inaceptable para los trabajadores, que exigen incrementos salariales en torno al IPC para los años 2023, 2024 y 2025.
En cuanto a la jornada laboral, la patronal ha puesto encima de la mesa una "reducción de jornada irrisoria" que no tendría efecto hasta el año 2025 en un sector en el que "es crucial la reducción de la jornada ya que la mayoría de las trabajadoras tienen jornadas parciales" (aproximadamente el 90% del sector).
"Respecto al cobro durante una incapacidad temporal, quieren dar tres pasos para atrás y plantean los mínimos legales, nunca garantizando el 100% desde el primer día. Estas y otras muchas solicitudes como vacaciones, plus de antigüedad y licencias retribuidas son menospreciadas por la patronal", denuncian las centrales.