Teresa Ibáñez Axpe (Murgia, 1944), la gran dama del cine, teatro y televisión que el pasado 8 de marzo protagonizó junto a otras cinco mujeres alavesas el reportaje Cadena de valores feministas de DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, ha tenido el honor de ser elegida por la Diputación Foral de Álava para ser pregonera de las fiestas de San Prudencio y Nuestra Señora de Estíbaliz 2024, “por su brillante trayectoria artística y su profundo compromiso social”.

En primer lugar, enhorabuena. ¿Qué supone para una alavesa como usted que le hayan elegido para ser la pregonera de las Fiestas de San Prudencio y Nuestra Señora de Estíbaliz 2024?

–Me supone un orgullo muy grande representar a todo Álava en un pregón como el de las fiestas de la provincia y que se hayan acordado de mí me enorgullece mucho. Estoy muy contenta. Quiero agradecer a todas las personas que se han acordado de mí para este pregón. Espero que salga un día que no llueva y que no haga frío porque ahora es en la calle, no como antes y que pasemos todos, vosotros escuchando y yo con el pregón, un día muy feliz.

¿Cómo reaccionó cuando se lo comunicaron?

–Me sorprendió mucho cuando me lo comunicaron. Me dijeron que estuviera callada hasta que se hiciera público y de mi boca no ha salido ni una sola palabra, hasta hoy que es cuando lo han anunciado (risas).

¿Qué significan estas fiestas para usted?

–Son las fiestas tradicionales de Álava, las que conservan su esencia, casi más que las de La Blanca, que me parecen más parecidas a otras, pero estas de San Prundecio me parecen exclusivas de aquí. Además, he participado activamente en ellas, porque he estado en Musiketxea (Academia municial de Folklore de Vitoria) unos años y, por ejemplo, cuando llegaba la víspera de San Prudencio y antes de que se hiciera la retreta en la plaza de la Provincia, ésta tenía lugar en la Plaza Nueva. Y ahí íbamos desde Musiketxea y cantábamos, me parece que de 19.00 a 20.00 horas. Lo que pasa es que luego te metes en otras cosas y el tiempo da para lo que da. Y con las fiestas de Estíbaliz también tengo recuerdos muy bonitos, como los de una visita que hicimos. A la vuelta, nos llevaron en Vitoria a merendar a los jardines de lo que era un centro psiquiátrico. Pero yo, como ya tenía muchos familiares en la ciudad, entre tíos primos y abuelos, me hice un poquito la chulita. Era muy pequeña, tendría unos 10 años, y desde ese centro me fui hasta La Florida porque a mí me gustaban muchos los helados. Como no avisé, todos los responsables estuvieron buscándome por todos los lados, hasta que aparecí y les dije que me había ido a comprar un helado.

Y ahora, ¿de qué manera vive estas celebraciones?

–Solemos comer caracoles y perretxikos. lo típico, pero ya se me han pasado los años de ir de fiesta. Con mis hijos íbamos siempre a la romería de Armentia, pero los años pasan y la trayectoria de la vida cambia. Ahora las vivo más desde el interior, de otra manera. Oigo, por ejemplo, la retreta desde casa, porque la retransmiten por la radio y la verdad es que muy bien.

Y en cuanto al pregón, ¿ha pesando ya cómo quiere que sea? ¿Sabe lo que quiere decir?

–Tengo como ráfagas, que me vienen de recuerdos e ideas bonitas, pero todo eso hay que encaminarlo hacia una dirección y hacerlo bonito. Pero todavía sin organizar, aunque tengo algo de tiempo.