Álava está desempeñando un papel crucial en la transición hacia una energía más sostenible en Euskadi que tiene como objetivo alcanzar la sostenibilidad energética en el territorio.
El objetivo marcado por el Plan Territorial Sectorial es que la cuota de energías renovables de consumo final llegue al 27,9% para el 2030. Las inversiones que se realicen en energías renovables permitirán a Álava convertirse en un epicentro de transición energética en Euskadi, y, sobre todo, reducir las emisiones de CO2 al tiempo que disminuye el coste de la energía para hogares e industrias. Para alcanzar ese objetivo es necesario invertir en energías renovables en Álava.
El potencial fotovoltaico de Álava con Solaria
Entre las diversas iniciativas que se están llevando a cabo, destaca la apuesta de Solaria, junto con el EVE, para la construcción de dos plantas fotovoltaicas, con una capacidad total de 100MW en 136 hectáreas en las poblaciones de Arratzua-Ubarrundia, Elburgo/Burgelu y Vitoria-Gasteiz. Estas plantas evitarán la emisión de 50.000 toneladas de CO2 al año y podrán abastecer a 60.000 hogares alaveses al año con energía verde durante más de 30 años.
Euskadi tiene un gran potencial para el desarrollo de energía solar fotovoltaica y nosotros, junto con el EVE y el apoyo del territorio, queremos ser partícipes de este cambio
Su beneficio se extiende más allá de la generación de energía limpia, ya que se estudia su compatibilidad con usos tradicionales del suelo, como la agricultura o la ganadería, demostrando que el desarrollo sostenible puede coexistir con otras actividades económicas.
El último hito importante para el inicio de su construcción se dio el pasado 30 de noviembre con la aprobación de la Autorización Administrativa Previa (AAP). Junto con la Declaración de Impacto Ambiental, suponen un paso firme para el inicio de la construcción de ambas plantas. Como afirma el director general de Solaria, Darío López, “La consecución de estos permisos ambientales y la autorización administrativa supone un gran hito para nosotros. Euskadi tiene un gran potencial para el desarrollo de energía solar fotovoltaica y nosotros, junto con el EVE y el apoyo del territorio, queremos ser partícipes de este cambio”.
En palabras del director general del Ente Vasco de la Energía (EVE), Iñigo Ansola, “este tipo de proyectos nos ayuda no sólo a luchar contra el cambio climático, sino que, además, permite bajar los precios de la electricidad, tanto para los hogares como para la industria”.
Con estas dos plantas, Álava es un ejemplo de cómo la energía fotovoltaica es fundamental para una transición energética eficiente y sostenible. Solaria no solo se posiciona como líder en la transición energética de Euskadi, sino que también establece un modelo a seguir en el camino hacia un futuro energético más limpio y sostenible.
