l sector de la energía constituye un pilar fundamental de la industria en Euskadi, fundamentalmente en territorio vizcaino. Actualmente, de todas las energías existentes, las renovables se perfilan como la palanca del desarrollo económino de los próximos años, no sólo a nivel vasco, sino también a nivel mundial.

En Bizkaia, y en general en Euskadi, el peso económico que aportan las empresas energéticas es un hecho que se apoya en datos evidentes. En Euskadi hay vinculadas al sector cerca de 350 empresas cuya facturación mundial es de 47.000 millones de euros, 15.000 millones en Euskadi y 12.000 millones en Bizkaia, donde representa el 7,5% del PIB.

En cuanto al empleo que genera el sector vasco de la energía en todo el mundo, la cifra alcanza los 63.000 empleos, 21.000 de ellos en el conjunto del País Vasco y 13.400 en Bizkaia.

Estas cifras ponen de manifiesto la importancia del sector en el desarrollo económico del país, un empuje que se va a ser reforzado próximamente con la apertura del EIC, Energy Intelligence Center,una iniciativa que quiere convertirse en un proyecto dirigido a posicionar Bizkaia y Euskadi como un polo de referencia internacional en el campo de la energía.

No hay duda, de que el momento actual de crisis sanitaria motivada por el covid-19 está provocando graves consecuencias en todos los sectores económicos y, por supuesto, la industria energética no se ha quedado al margen.

Debido a todo ello, las empresas pertenecientes al Clúster de Energía del País Vasco esperan para este año una caída de facturación media entorno del 15%, aunque no se prevén reducciones tan importantes en el empleo (menos de un 5%) ni en la inversión en I+D (5-10%).

Son datos que se han dado a conocer durante la celebración de la asamblea general de dicha agrupación, donde su director general, José Ignacio Hormaeche, ha presentado una evaluación del impacto de la crisis del covid-19 en el sector.

Según las cifras aportadas por el Clúster, las empresas de las cadenas de valor de Redes Eléctricas y de Eólica esperan menores impactos negativos en 2020, mientras que las más afectadas son las de Oil (Petróleo) y Gas y la de Solar Fotovoltaica, principalmente el segmento de Autoconsumo.

A igual que la valoración sobre las pérdidas, el citado encuentro entre profesionales del sector ha permitido estudiar cómo va a afectar la pandemia al futuro. Así, las empresas prevén una recuperación de la actividad para el 2021 en el entorno del 5%, con mejores expectativas para los segmentos de componentes y sistemas en Redes eléctricas, sector eólico, solar fotovoltaica y movilidad eléctrica. En este sentido, Hormaeche ha destado durante la cita, que numerosos agentes, tanto públicos como privados, reclaman un impulso a las inversiones en transición energética hacia un modelo más des carbonizado y sostenible, basado en la electrificación de los consumos y el uso de energías renovables, como uno de los motores para la recuperación económica a nivel global.