Los tiempos cambian y hay que adaptarse a las nuevas situaciones con ideas creativas. Lo que hoy puede ser novedoso mañana puede dejar de serlo. Por eso, innovar es esencial. Navarra se ha fortalecido desde la crisis del coronavirus. Sectores como el sanitario o el trabajo remoto se han fortalecido, y con ello, se han detectado otras necesidades. El consejero de Universidad, Innovación y Transformación Digital de la Comunidad Foral de Navarra, Juan Cruz Cigudosa, subraya que Navarra está en constante transformación y continuará haciéndolo hasta lograr una sociedad "digital y del conocimiento".
¿Ha afectado la situación creada por la pandemia a la innovación?
Tal y como afirma la historia y el informe de McKinsey sobre innovación en Covid-19, las crisis son adrenalina para la innovación. En la reciente crisis financiera de 2008 aceleró a adopción de cloud computing y social marketing, principalmente debido a la escasa liquidez disponible para continuar con las viejas modas del marketing tradicional o computación en casa, pero si nos vamos más atrás, al albor de la Segunda Guerra Mundial, nació la energía nuclear, los cohetes y la investigación aerospacial, y un fantástico científico llamado Alan Turing inventó la computación. El coronavirus nos ha hecho fuertes.
"La Comunidad Foral ha sido resistente por su gran dependencia industrial y su escasa dependencia del sector servicios"
¿Qué sectores se han fortalecido?
Navarra ha sido resistente por su gran dependencia industrial y escasa dependencia del sector servicios. Estos sectores como el home delivery, el trabajo remoto, y el sanitario se han fortalecido y se ha detectado un aumento de inversiones.
¿En qué situación se encuentra Navarra en cuanto a innovación, cuáles son sus puntos fuertes?
Navarra está conectándose con el resto del mundo y asumiendo la posición que le toca en el mapa europeo de la I+D+i. Es cierto que esto tardará en verse en los rankings, pero con el trabajo de los últimos dos años lo que está claro es que, entre muchas otras cosas, será la capital del Ebro Food Valley, una de las tres capitales españolas de la Medicina Personalizada reconocidas por el ISCIII, lo que atraerá talento internacional bajo los programas WIT y ANDIA. Además, dispone de un CAIDI internacional, y las universidades y centros de investigación cuentan con ayudas para ser reconocidos internacionalmente bajo los programas Severo Ochoa, María de Maeztu o ERC.
"Todos los sectores requieren de inversión, y contribuir a afrontar unas transiciones de sostenibilidad y digitalización"
¿A qué se debe el éxito?
Todo esto ha sido gracias a las condiciones socioeconómicas que retienen el talento, como muestra el Mapa de Talento de Cotec y el estudio europeo RIS, con un capital humano altamente cualificado. Contamos con una industria que participa en la economía navarra un 30% de la innovación, tanto en financiación de la I+D (2/3 del gasto) como ofreciendo un gran número de empleos de alta tecnología e intensidad de conocimiento.
¿En qué vías de innovación se trabajan y qué sectores destacan?
Trabajamos fundamentalmente en cuatro sectores altamente tecnológicos. En primer lugar, en la automoción y mecatrónica; en segundo lugar en energías renovables; en tercer lugar, en todo aquello relacionado con la Salud, con mucho impacto en medicina personalizada; y en último lugar en lo que se refiere a la cadena alimentaria (con cuatro institutos especializados).
"Tenemos buenas condiciones socioeconómicas que retienen el talento con un capital humano altamente cualificado"
¿Dónde se necesita más inversión?
Todos los sectores requieren de inversión, si bien es cierto que, analizando tramos de la cadena de valor de algunos de estos sectores, algunos de ellos tienen lugar fuera de Navarra. Además, todos requieren contribuir a afrontar unas transiciones de sostenibilidad y digitalización.
¿Qué herramientas ofrecen desde las instituciones y a quién?
Invertimos, sobre todo, en conocimiento. Y es que para salir de esta crisis son necesarias todas estas herramientas. Por un lado, la incorporación de talento fomenta la contratación de personal cualificado. Después, financiar los centros y que aseguran la financiación de proyectos de envergadura para los centros del sistema navarro de I+D+I (SINAI) y, por tanto, su sostenibilidad. Estamos capacitando a nuestros agentes de innovación para desarrollar nuevos proyectos. Del mismo modo, financiar los proyectos de colaboración cuya duración pasa a ser de tres años como máximo, en lugar de los doce meses de las ediciones. También se ofrecen los bonos UIE que ayudan a mejorar las infraestructuras para posicionar a Navarra tecnológicamente y adaptada a una normalidad con otros parámetros. También para fomentar la colaboración supra regional, no estamos solos. Y saldrá una para fomentar la cultura científica.
¿Cuál es el objetivo que persigue Navarra en innovación, y cómo ha crecido en los últimos años?
Sin duda, una sociedad navarra digital y del conocimiento. Claro está, incluyendo, por supuesto, su economía, su educación, y su sanidad. Todo ello basado en la evidencia y el conocimiento, para aplicar cambios y generar valor (social, económico, público) así como reducir las inequidades para el ciudadano, instituciones y empresas.