Síguenos en redes sociales:

El Gobierno español aprueba un real decreto en favor de las víctimas del amianto

"Escucharles y alcanzar este mecanismo era una cuestión sobre todo de justicia hacia todos ellos y hacia todas ellas, y de esta manera, con estas medidas, damos respuesta a una demanda histórica", ha anunciado Pilar Alegría

El Gobierno español aprueba un real decreto en favor de las víctimas del amiantoEFE

El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el real decreto con el desarrollo reglamentario que permitirá a las víctimas del amianto acceder a las ayudas del fondo de compensación dos años y medio después de su aprobación.

Según ha avanzado la ministra de Educación, Formación Profesional y Deportes y portavoz del Gobierno español, Pilar Alegría, se ha dado luz verde a esta normativa pendiente que establece los requisitos y el procedimiento para reconocer el derecho de la compensación económica a las víctimas del amianto.

"Sabemos que muchos de los daños de estos afectados son difícilmente reparables, pero escucharles y alcanzar este mecanismo era una cuestión sobre todo de justicia hacia todos", ha señalado Alegría.

En octubre de 2022 se aprobó la Ley de Creación de un Fondo de Compensación para las Víctimas del Amianto, que daba un plazo de tres meses para elaborar un reglamento que regulara la cuantía de las indemnizaciones, las condiciones para acceder al fondo o el procedimiento para cursar las peticiones.

Unanimidad en los grupos para la creación del fondo

El amianto es un agente cancerígeno responsable de asbestosis o cáncer de pulmón y la creación del fondo salió adelante por unanimidad de todos los grupos políticos tras años de reivindicación de sindicatos y asociaciones de víctimas.

El fondo, tal y como quedo recogido en la ley, se gestionará por el Instituto Nacional de la Seguridad Social y contará con consignaciones o transferencias que se determinen en los presupuestos, así como con otras aportaciones como, por ejemplo, de sanciones a empresas. El pico máximo de uso del amianto se produjo en España entre los años 1970 y 1980, y unas tres cuartas partes fueron utilizadas en la construcción.