El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno Vasco, Pedro Azpiazu, ha asegurado este miércoles que Mercedes "necesita a los trabajadores", al igual que "los trabajadores y Euskadi necesitan a Mercedes", por lo que ha considerado que el acuerdo entre la empresa y los sindicatos "es necesario y va a llegar".

Azpiazu se ha referido así, en una entrevista concedida a ETB1 a la primera jornada de huelga convocada para este miércoles por los trabajadores de Mercedes Benz de Vitoria ante el bloqueo de la negociación colectiva.

El consejero vasco de Economía y Hacienda ha indicado que, "en general, las huelgas no me gustan", aunque ha matizado que "habría que ver cuales son las razones" de los trabajadores para convocar los paros, "que yo desconozco".

En todo caso, ha afirmado que, de cara al futuro, y teniendo en cuenta la importancia que la compañía alemana tiene tanto en Vitoria-Gasteiz como en Euskadi, "hay que buscar una solución y llegar a un acuerdo para que las cosas vayan bien".

En su opinión, existe "un buen proyecto de Mercedes para el futuro de Euskadi", y que, por lo tanto, "entre todos debemos avanzar", aunque eso no significa que "los trabajadores no tengan problemas que hay que solucionar".

"La dirección debe hablar con los trabajadores para llegar a un acuerdo. Creo que Mercedes necesita a los trabajadores y los trabajadores y Euskadi necesitan a Mercedes. El acuerdo es necesario y creo que va a llegar. Mercedes lleva años en Vitoria y Euskadi, y creo que aquí seguirá en el futuro, porque aquí tiene fuerza, experiencia, trabajadores preparados y todos los proveedores", ha destacado.

En este sentido, ha recordado que el próximo mes de julio el lehendakari, Iñigo Urkullu, y la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente, Arantxa Tapia, viajarán a la sede de la empresa en la ciudad alemana de Stuttgart, y que iniciativas así "facilitarán el futuro".

"Creo que van a eso, aunque yo no lo veo en peligro. Claro que hay trabajar y solucionar algunas cosas, pero creo que el futuro va a ser bueno", ha manifestado.

Huelga de este miércoles

La huelga convocada para este miércoles por los sindicatos en la planta de Mercedes en Vitoria para exigir avances en la negociación del convenio ha paralizado la producción en la factoría, han confirmado fuentes de la dirección y del comité de empresa.

Los 5.000 trabajadores de la mayor empresa de Euskadi están llamados hoy a parar su actividad, a través de dos convocatorias paralelas: una de ELA, LAB y ESK, y la otra de UGT y CCOO. Estos dos últimos sindicatos tienen anunciada otra huelga para el día 29 y los tres primeros otros días de paros entre el 27 de junio y el 1 de julio.

Fuentes de la representación de los trabajadores han precisado que la huelga está siendo secundada por el 95 % de los trabajadores del primer turno y el comité de empresa confía en que suceda algo parecido en los otros dos turnos, el de tarde y el de la noche.

Por su parte, una portavoz de la dirección de la planta ha confirmado que la producción está parada y que no se ha registrado ningún incidente a la entrada de los empleados que han querido trabajar, algo que ha ocurrido con "respeto absoluto", lo que ha valorado de manera "muy positiva".

Al inicio de ese primer turno, en torno a las seis de la mañana, se han concentrado piquetes a las puertas de la planta, sin que se haya producido ningún incidente entre sus integrantes y los empleados que han entrado a trabajar.

Las fuentes del comité han señalado que la plantilla quiere con este seguimiento decir que no quiere una sexta noche, ni un trato "discriminatorio" para las nuevas incorporaciones ni que las subidas salariales sean por debajo del IPC.

Han considerado un "chantaje" que la dirección de la empresa haya decidido no retomar las negociaciones del convenio hasta que pasen las jornadas de movilización.

ELA ha hecho público un comunicado en el que considera que el "masivo seguimiento" de la huelga debe traducirse en un "rechazo total y rotundo a la posición de la empresa durante toda la negociación, en especial a su pretensión de ampliar la flexibilidad con una sexta noche" de trabajo.

La plantilla ha dejado claro, según esta central, que "no aceptará más flexibilidad para que su conciliación familiar y sus condiciones de vida empeoren a cambio de que aumenten los beneficios", aunque sí ha reconocido que está dispuesta a que aumente la producción, "pero con fórmulas que creen empleo en buenas condiciones".

Las dirección de Mercedes Vitoria envió ayer a los trabajadores un comunicado en el que consideraba la convocatoria de huelgas algo "totalmente incoherente" con la propuesta de inversiones para la planta de Vitoria y acusó al comité de empresa de "boicotear" la negociación del convenio, al que está "condicionado" ese plan inversor.

Esta primera jornada de paro se produce después de que la dirección de la multinacional anunciara la posibilidad de hacer una inversión en la planta de Vitoria de 1.200 millones de euros.