- El Gobierno aprobó ayer el décimo PERTE -Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica-, un plan para convertir a España en referente en microelectrónica y semiconductores gracias a una inversión pública que podría llegar a 12.250 millones hasta el año 2027. El bautizado como Perte Chip, impulsado gracias a la llegada de los fondos europeos, es “el más ambicioso” hasta la fecha por su cuantía, su potencial impacto transformador y su posible contribución a la autonomía tecnológica de España y la UE.
La vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, destacó que el volumen de inversión permitirá generar un efecto “multiplicador” en el conjunto de la economía española. El objetivo es “desarrollar de manera integral las capacidades de diseño y producción de microelectrónica y semiconductores, abarcando toda la cadena de valor”. Al mismo tiempo que el Consejo de Ministros daba luz verde a este nuevo PERTE, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se reunía en el Foro Económico Mundial de Davos, a fin de captar inversiones, con los consejeros delegados de cuatro empresas de referencia en el sector: Intel, Qualcomm, Micron y Cisco. En su encuentro con el consejero delegado de Qualcomm, Cristiano Amon, Sánchez manifestó la intención de España de contar con la que actualmente es la primera empresa mundial en diseño de microchips como “socio clave”.
El Plan se articulará en cuatro ejes fundamentales: el refuerzo de la capacitación científica, la estrategia de diseño, la estrategia de fabricación y la de la industria de fabricación del sector de la información y las comunicaciones (TIC). El primero de ellos contará con una dotación económica de 1.165 millones para reforzar la capacidad científica, desarrollando la I+D+i sobre microprocesadores o chips cuánticos; y para lanzar una línea de financiación con la que reforzar la participación en los proyectos estratégicos desarrollados a nivel europeo. La estrategia de diseño tendrá una cuantía de 1.330 millones para potenciar la capacidad española en el diseño de microprocesadores, mientras que la dinamización de la industria de fabricación de tecnologías y las comunicaciones europeas contará con 400 millones destinados a financiar medidas como la creación de un fondo de chips para escalar las empresas emergentes en expansión, entre otras.
La mayor dotación irá destinada al eje de la estrategia de fabricación, que con una inversión pública de 9.350 millones permitirá construir plantas de fabricación con capacidad tanto inferior como superior a los cinco nanómetros , de vanguardia y gama media, respectivamente. Para asegurar la coordinación, efectividad y coherencia de las actuaciones enmarcadas en el proyecto, el Ejecutivo ha creado un puesto de comisionado especial que ocupará Jaime Martorell Suárez.
lll Estratégicos. El Perte Chip es el décimo proyecto estratégico que aprueba el Gobierno en el marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado con fondos europeos. Este proyecto es el que cuenta con una mayor dotación pública, por delante del Perte de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento, en el que el sector público aportará más de 6.900 millones de los 16.300 millones de inversión que pretende movilizar. También supera al del vehículo eléctrico y conectado, con una contribución del sector público de 4.300 millones y una inversión privada de 19.700 millones. Estos planes son proyectos estratégicos para el futuro de la economía.