La plantilla de la empresa de Galletas Artiach -ubicada en la localidad vizcaína de Orozko, aunque con un buen número de sus 192 operarios (más de una veintena de ellos en puertas de la jubilación) residentes en los municipios alaveses de Llodio, Amurrio y Artziniega- lleva en huelga parcial por turno desde el pasado 22 de noviembre en defensa de "un convenio justo".
Y es que el anterior data de 2018, y cuando en 2019 se iniciaron las negociaciones para su renovación "nos encontramos con que la empresa quería utilizarlas para empeorar las condiciones laborales, donde los trabajadores temporales y las nuevas contrataciones sufrirían las peores condiciones", explicaron ayer a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA desde el comité de empresa, integrado por los sindicatos LAB, ELA, ESK, UGT y un independiente, aunque estos dos últimos no secundan los paros diarios de cuatro horas.
La mayoría sindical -que ha llegado a denunciar esta semana ante Inspección de Trabajo "esquirolaje interno"- critica que desde que "Nutrexpa y luego Adam Foods" se hicieran cargo de la planta vizcaína "estamos viviendo más conflictos laborales que en las últimas décadas". De hecho, "cuando iniciamos la huelga, la empresa nos impuso servicios esenciales que vulneran el derecho mismo a la huelga, y la justicia nos ha dado la razón. La empresa ha recurrido el fallo y también un sindicato, por considerar que hay que pedir más indemnización", explican.
En concreto, la propuesta de la firma "viene a decir que se disminuye el plus de antigüedad, se aumenta la flexibilidad y la jornada, que dificultan aún más la conciliación de la vida laboral y familiar, y se aplica una doble escala salarial para nuevas contrataciones. Del sueldo del personal fijo no se ha llegado a hablar en estos dos años de reuniones con dirección, y sin avances", matizan.
Amenaza de deslocalización
Además, denuncian que la empresa dijo que, "si no se cumplen estas condiciones, no realizará las inversiones necesarias para el correcto funcionamiento y modernización de la fábrica, e incluso, nos han llegado a amenazar con la deslocalización, porque tienen más plantas en otros sitios", aseguran.
LAB, ELA y ESK, por el contrario, consideran que es el momento de que las condiciones laborales en Galletas Artiach se mejoren sustancialmente. "Márgenes hay, y muchos, ya que los beneficios económicos son altísimos , en los últimos tres años ascienden a casi 20 millones de euros. Pero pretenden que las inversiones en la planta de Orozko las asuma la plantilla, a base de recortes en nuestros derechos laborales", subrayan. Al mismo tiempo, quieren trasladar su agradecimiento por las "muchas muestras de solidaridad y apoyo que estamos recibiendo, tanto de comités de otras empresas y agentes sociales como de personas anónimas" que les hacen llegar sus ánimos.
A este respecto, señalan tener muy claro que la organización y la lucha "son la única manera de que esta empresa no nos robe nuestros derechos, y así nos vamos a mantener hasta lograr nuestro objetivo: un convenio justo", apostillan, no sin antes dejar claro que no se niegan a retomar la negociación. "Lo estamos deseando, pero sin desconvocar la huelga, como nos piden. Hacerlo y volver a una mesa en la que no sabemos ni a donde vamos o cuales de nuestras propuestas están dispuestos a aceptar, por miedo a que se lleven la empresa, sería tirar casi tres meses de movilizaciones por la borda. Y no lo vamos a hacer, porque no nos fiamos. Así de simple", sentencian.