La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) declaró ayer nulos los despidos en las plantas alavesas de Amurrio y Llodio. Las dos sentencias del alto tribunal, tras los juicios celebrados los pasados 21 y 22 de junio, van en el mismo sentido y declaran la nulidad de los 129 despidos en esas plantas.

El TSJPV no ve acreditadas causas económicas en ellos y los vincula a la incidencia de la covid-19. Considera que la empresa no puede eludir la legislación laboral extraordinaria dictada para evitar la destrucción de empleo por la pandemia.

La noticia, como no podía ser de otra manera, corrió como la pólvora entre los y las trabajadoras y fue recibida con "inmensa alegría". Y es que, tras 146 días de huelga indefinida en las plantas alavesas de Tubacex y un sinfín de movilizaciones y unidad, el fallo, a su juicio, es una "victoria para toda la plantilla".

Pese a ello, las centrales sindicales no se quisieron adelantar a hacer declaraciones en caliente y -según explicó a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA, el portavoz del Comité y miembro de ELA, Eduardo Ibernia- "vamos a analizar ambas sentencias para hacer una valoración y realizaremos asambleas de afiliados en próximos días". Asimismo, LAB valoró "de manera muy positiva el gran trabajo" realizado por sus delegados y afiliados, y felicitó a la plantilla, a quien animó "a seguir luchando" hasta que la empresa readmita a las persona despedidas.

Y es que el expediente de regulación de empleo ha sido analizado en dos vistas -la correspondiente a TTI, en la sala de la presidenta de lo Social, Garbiñe Biurrun, el pasado 21 de junio; y la de Aceralava, en la del magistrado Juan Carlos Iturri, al día siguiente aunque en ambos casos los jueces han aplicado el criterio de nulidad para los despidos en tiempos de pandemia al considerar, como siempre han esgrimido desde los sindicatos, que la crisis era coyuntural y no estructural, y que por lo tanto había que tomar medidas acordes y no despidos.

Además de la readmisión, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco obliga a Tubacex a pagar a las personas despedidas las cantidades que les correspondan desde su salida de la empresa. Un total de 26 en la planta de Aceralava en Amurrio, y otras 102 en las de TTI de Llodio y Amurrio, de los que 95 fueron despidos directos, y el resto bajas incentivadas o jubilaciones anticipadas.

El TSJPV señala, también, que la 'normativa Covid' impone no despedir "por causas objetivas y relacionadas por el Covid, lo que entendemos que es el caso de autos", indican los magistrados en su sentencia referida a la planta de Aceralava, de Llodio. "La mayoría de los que firmamos esta sentencia -indica la resolución- consideramos que la hermenéutica jurídica de la misma impone la nulidad y no la declaración del despido no ajustado a Derecho", concluye el fallo judicial emitido por el TSJPV.