- Como consecuencia de la pandemia de covid-19, en 2020 se redujeron un 8,8% la cantidad de horas de trabajo en el mundo, o el equivalente a 255 millones de empleos, según destacó ayer un nuevo informe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT). La pérdida de ingresos provenientes del trabajo el pasado año fue similar, del 8,3%, equivalente a 3,7 billones de dólares (3 billones de euros), es decir, al 4,4% del PIB mundial.

Los 255 millones de empleos perdidos (aunque en muchos casos fuese imposibilidad de trabajar durante la pandemia) suponen un impacto cuatro veces mayor que el provocado por la crisis financiera mundial de 2009, destacó la OIT.

Cabe destacar que, pese a las altas cifras, la pérdida de horas de trabajo considerada por la OIT para todo 2020 fue sensiblemente inferior a la que calculó en el segundo trimestre del pasado año (400 millones de empleos) y el tercero (casi 500 millones).

“Los indicios de recuperación que vemos son alentadores, pero muy frágiles e inciertos, y cabe recordar que ningún país o grupo puede recuperarse solo”, señaló en la presentación del informe el director general de la OIT, Guy Ryder.

Por regiones, Latinoamérica fue la que sufrió una mayor pérdida relativa de horas de trabajo, del 16,2%, equivalente a 39 millones de empleos. Norteamérica y Europa vieron caer un 9,2% sus horas de trabajo (el equivalente a 13 y 30 millones de empleos, respectivamente), y aunque Asia-Pacífico registró un menor porcentaje (7,9%), en términos absolutos fue la zona donde más empleo se perdió (el equivalente a 140 millones de trabajadores).