- La Comisión Europea descartó ayer la posibilidad de crear un banco malo europeo para que el incremento de préstamos de dudosa devolución por parte del beneficiario no figure en los balances de los bancos. En su lugar, anunció que explorará la posibilidad de poner en marcha una red europea que conecte las compañías nacionales de gestión de activos, como la Sociedad de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) en España.
El vicepresidente económico del Ejecutivo comunitario, Valdis Dombrovskis, y la comisaria de Servicios Financieros, Mairead McGuinness, presentaron ayer en una rueda de prensa la nueva estrategia de Bruselas para prevenir la acumulación de estos activos tóxicos, conocidos en inglés por las siglas NPL.
Bruselas descarta la creación de un banco malo europeo porque considera que existen “varios factores” que lo dificultan, como por ejemplo la “diversidad” de carteras actuales de préstamos dudosos, las diferentes legislaciones sobre reestructuración y procedimientos de insolvencia y los “elevados costes” que supondría su puesta en marcha.
“Lo hemos analizado pero la realidad sigue siendo que estas deudas se resuelven a través de legislaciones nacionales de insolvencia y actualmente no vemos que sea factible elevarlo a nivel europeo”; defendió el letón.
En su lugar, anima a los Estados miembros a poner en marcha compañías de gestión de activos a nivel nacional y anuncia que estudiará “cómo se pueden crear sinergias y cooperación estableciendo una red europea” de estas sociedades, que las reúna con el Banco Central Europeo (BCE) y la Autoridad Bancaria Europea (EBA).